Sociedad
Marquesa de Griñón

Este es el paso que tiene que dar Tamara Falcó antes de ser madre

Tamara Falcó e Íñigo Onieva quieren formar su propia familia

Isabel Preysler es la matriarca de un clan que protagoniza las portadas de las mejores revistas. Dentro de este clan podemos destacar la presencia de Tamara Falcó, actual marquesa de Griñón. Heredó el título de su padre, el famoso Carlos Falcó, y desde entonces se posicionó como un rostro muy cotizado dentro de la aristocracia madrileña. Por ese motivo su boda con el empresario Íñigo Onieva ha dado tanto de que hablar. Tamara anunció en su publicación de cabecera que iba a pasar por el altar y que quería formar una familia. El problema es que Íñigo le fue infiel poco después de salir a la luz esta noticia y se vio obligada a romper su relación con él.

Tamara Falcó se ilusionó brevemente por otro hombre, pero terminó dándose cuenta de que estaba realmente enamorada de Íñigo Onieva. Por ese motivo decidió perdonarle y empezar una nueva etapa. El ingeniero ha cambiado sus viejas costumbres. Recordemos que antiguamente era muy habitual verla y disfrutar de la noche de Madrid, tanto es así que es propietario de una discoteca situada en Gran Vía. Pero la actitud de Onieva ha dado un giro de 180 grados, tanto que ahora quiere ser padre. En su momento confesó que quería formar una familia numerosa, aunque está teniendo muchos problemas para alcanzar este objetivo.

Incluso antes de la boda, Tamara visitó y pidió consejo a algunos expertos para poder quedarse embarazada. Todo esto puso en circulación unos rumores que no sentaron nada bien a la hija de Isabel Preysler. Se empezó a especular con las complicaciones que estaba teniendo a la hora de engendrar y ella admitió que había iniciado un tratamiento natural para favorecer el proceso. Ahora ha dado nuevos datos y ha explicado que no tiene pensado someterse a una fecundación in vitro porque va en contra de sus principios.

El paso que tiene que dar Tamara Falcó

La fecundación in vitro sería una opción viable para Tamara Falcó. Esta técnica le permitiría cumplir su sueño, aunque antes tiene que debe algo muy importante para ella. «Tengo que hablar con el director espiritual», ha comentado recientemente. Tamara explicó en su momento que cuando estaba atravesando una mala racha la Biblia se cruzó en su camino y encontró refugio en la religión. Pasó una temporada en el Palacio de El Rincón, que era propiedad de su padre, y aprovechó para reflexionar y conectar con Dios.

Tamara insiste en que sus principios le impiden dar ciertos pasos, por eso en su día recurrió a un tratamiento natural cuyo único objetivo era favorecer su fertilidad. Pero de momento hay cosas que no puede hacer, de ahí que tenga que pedir consejo a su director espiritual. «Siempre piensas que te vas a quedar, y crees que el problema es de otros, no tuyo», ha declarado al respecto.

Tamara Falcó desmiente su crisis matrimonial

Tamara Falcó reconoce que discute con Íñigo Onieva como sucede «en todas las parejas», pero asegura que sus dificultades para quedarse en estado no han motivado ningún conflicto entre ellos. Hace un tiempo se empezó a especular con una posible crisis matrimonial. Lo cierto es que Íñigo y Tamara realizaron un viaje fuera de España y cuando llegaron al aeropuerto de Madrid cada uno salió por una puerta distinta. Este detalle hizo saltar las alarmas y no son pocos los que aseguran que hay algo que no están contando.

La aristócrata conoce perfectamente cómo funciona la crónica social y está intentando refugiarse de sus detractores. El problema es que es un rostro muy mediático, así que no tiene demasiadas oportunidades para esconder sus secretos. El programa ‘Fiesta’ de Telecinco aseguró que Tamara había estado en una farmacia situada en Ibiza comprando un test de embarazo. Esta noticia corrió como la pólvora y puso en circulación muchos comentarios, pero el tiempo ha demostrado que Falcó todavía debe esperar para abrazar a su primer hijo.

Isabel Preysler está deseando ser abuela de nuevo

Isabel Preysler disfruta de una relación muy cercana con todos sus hijos, pero con Tamara ha creado un vínculo especial. Tanto es así que prácticamente continúan viviendo juntas. La marquesa compró un ático de lujo en la misma urbanización donde vive Isabel, Puerta de Hierro. Ha reformado la casa y la ajustado a sus necesidades, pero si sigues sintiendo más a gusto en la mansión de la Reina de Corazones. Por ese motivo hay noches que duerme allí.

Isabel está deseando que su hija se quede embarazada, aunque es consciente de que este tema es incómodo en muchos aspectos, por eso tiene cuidado para no meterle presión. Hay que recordar que Ana Boyer, otra de las hijas de Preysler, está esperando un nuevo bebé, así que el clan crecerá muy pronto. Pero, ¿cuándo volverá a hacerlo gracias a Íñigo y Tamara?