En el trabajo también debes lavar las manos
En el trabajo también debes lavar las manos. Al igual que mantienes esta costumbre en casa cada vez que vas a comer, en el trabajo también deberías ser cuidado con la higiene. Desde bien jóvenes nos inculcan la necesidad de frotar con jabón las manos debajo del grifo para evitar la transmisión de gérmenes y bacterias.
Algunos se limitan a lavárselas únicamente con agua, pero también es preciso utilizar jabón, frotar, aclarar y secar correctamente.
Hay que tener en cuenta que estamos en todo momento en contacto permanente con objetos cargados de bacterias. Por eso nada más llegar a la oficina lavaremos las manos, sobre todo si te desplazas en transporte público. También hay que realizar lo propio antes y después de las reuniones para disminuir el riesgo de contagio.
Para conseguir un entorno de trabajo más sano hay que utilizar jabón. No basta con poner las manos debajo del grifo y mojarlas. Esto debe convertirse en una rutina constante sobre todo antes y después de comer, además de cuando manejes maquinaria, utensilios y herramientas.
Aunque parezca mentira, una adecuada higiene de las manos afectará de manera importante sobre la salud. Entre otras cosas porque acabará con las bacterias y evitará la aparición de posibles enfermedades como catarros, gripes y resfriados a consecuencia del contagio.
Pero el proceso de lavado de manos no acaba cuando cerramos el grifo del agua, ya que también es preciso secarlas correctamente para que no surjan hongos ni otras afecciones de la piel.
Lo importante de este lavado de manos es que se haga con jabón o una solución jabonosa, sin influir tanto en ello la temperatura del agua. Se debe frotar de ambos lados de las manos, debajo de las uñas y los dedos, por espacio de veinte segundos, para acabar aclarando el jabón y la suciedad acumulada.
En casa utilizaremos una toalla de algodón para secarnos, pero en los lugares públicos, por lo general se emplea toallas de papel desechables o a través de secadores eléctricos. En el caso de que te encuentras en el baño de un establecimiento y no tengas jabón, la solución pasaría por emplear toallitas con solución jabonosa o gel hidroalcólico.
No te olvides de limpiar las manos después de manipular alimentos, tocar animales o tierra, cambiar pañales, tocar bebés, utilizar el inodoro, permanecer en contacto con personas enfermas o mayores, viajar en transporte público, estar en lugares con mucha gente o estornudar.
Incluso existe el Día Mundial del Lavado de Manos con Agua y Jabón, que tiene lugar el 15 de octubre. En realidad pretende concienciar a la gente sobre lo importante que resulta mantener unos adecuados hábitos de higiene. En los países más desfavorecidos se llegarían a evitar casi el 44% de los fallecimientos por enfermedades diarreicas.
Lo último en OkSalud
-
Explosión de pólenes: niveles de gramíneas y olivo diez veces superiores al umbral de riesgo alto
-
Mónica García permite que sólo el 40% de los robots quirúrgicos estén en la sanidad pública
-
La Sanidad de Page tarda seis años en hacer una reconstrucción mamaria a una mujer
-
La IA no engaña al cerebro: por qué nuestra mente reacciona de forma diferente al hablar con un humano
-
¿A qué precio adelgazar? Las dietas restrictivas pueden dañar la salud mental
Últimas noticias
-
Multas de hasta 5.000 euros si haces esto en tu autocaravana: todos lo hacen y la DGT lo sabe
-
Adiós al papel higiénico: los científicos confirman que su sustituto ya está aquí y es mucho mejor
-
Ni vinagre ni productos químicos: el sencillo truco para repeler a hormigas y cucarachas este verano
-
Ni los pisos ni los adosados: miles de personas afectadas por el nuevo objetivo de los okupas
-
Malos tiempos para el bipartidismo