El seitán, fuente de proteínas vegetales

El seitán es originario de Asia y no es más que glúten de trigo procesado para separarlo del almidón y texturizado para que se pueda cocinar. Por su aspecto puede llegar a parecer un filete y es por ello que se le considera como la carne vegetal que más se emplea para lograr sucedáneos similares a platos que llevan carne para todos los vegetarianos o personas que quieran reducir el consumo de carne de su dieta.

Su elaboración es un proceso muy sencillo y barato ya que sólo es necesario emplear agua, gluten de trigo, sal, especias y las salsas que se deseen utilizar para darle sabor. Se puede hacer fácilmente en casa, pero a día de hoy, podemos encontrarlo en casi todos los supermercados. Se presenta en diferentes formatos como en forma de filetes o en bloque y normalmente envasado al vacío.

El consumo de carne ha descendido en Europa un 46% según el proyecto Smart Protein financiado por la Unión Europea (UE). Este estudio desveló que se está produciendo un cambio significativo en los hábitos de los consumidores europeos respecto al consumo de proteínas y la tendencia es optar por una alimentación más centrada en alimentos de origen vegetal. El informe valida y prueba productos basados en proteínas vegetales innovadoras como el tofu, el seitán o el tempeh.

Propiedades y usos en la cocina

El 80-90% del peso del seitán es gluten, o sea, proteína del trigo con alto valor nutricional, aunque es bajo en lisina, un aminoácido esencial. Por esto se recomienda que su consumo se acompañe de alguna legumbre para aumentar su calidad nutrimental.

Una porción de 100 gramos de seitán sólo contiene 123 calorías; aporta 24 gramos de proteína, 2 gramos de carbohidratos y 2 gramos de grasa; también contiene potasio y calcio.

Una ventaja importante de su consumo es que, al ser de origen vegetal, no aporta colesterol como lo hacen la mayoría de las proteínas animales, por lo que su consumo ayuda a bajar los niveles en sangre.

Su uso en la cocina vegetariana y vegana está muy extendido porque, a diferencia del tofu, tiene mucho sabor y no necesita demasiados condimentos para aderezarlo. Se puede hacer a la plancha como si fuera un filete, picarlo o hacerlo en tacos. Se pueden elaborar todo tipo de recetas tradicionales con el seitán; es un sucedáneo muy fácil de usar ya que se comercializa cocido.

Albóndigas de seitán en salsa de curry

Es una receta muy fácil que se puede hacer en casa sin apenas esfuerzo:

Ingredientes para dos personas:

● 200 grs de seitán
● 50 grs de zanahoria
● 50 grs de manzana
● 50 gr. de cebolla
● 250 ml. de caldo de verduras o agua
● 2 cucharadas de curry
● 50 gr. de miga de leche empapada en leche o preparado vegetal
● 1 huevo (opcional)
● Sal y pimienta

Elaboración de la salsa:

1. Saltear en una sartén la cebolla, la manzana pelada y la zanahoria, todo cortado en juliana. Sofreir hasta que esté dorado.
2. Añadir el caldo o el agua y dejar hervir a fuego medio durante 20 minutos.
3. Echar las dos cucharadas de curry y remover. Añadir sal al gusto.
4. Triturar toda la salsa en una batidora y ponerla en una sartén a fuego lento hasta que tengamos las albóndigas..
Elaboración para las albóndigas
1. Triturar el seitán en un procesador y añadir la miga de pan y el huevo (si se quiere) hasta obtener una masa como la carne picada.
2. Hacer bolitas con la mezcla y freírlas levemente en aceite de oliva para dorarlas.
3. Echar las albóndigas en la salsa y mezclar durante dos minutos.
Podemos presentarlas con un poco de puré de patata o arroz, a gusto del consumidor.