Así es la depresión de la cuesta de enero
Ya han terminado las celebraciones, las fiestas y entramos de lleno en 2024. Con este nuevo año, y como todos, llega la temida ‘cuesta de enero’, y no hablamos solo en el plano económico. Según la Alianza Nacional de Enfermedades Mentales (NAMI), el 64% de las personas informan que se ven afectadas por la depresión navideña. En la otra cara de la moneda se sitúan las personas que tras este corto periodo estival sufren depresión o tristeza postvacacional. Y la ciencia lo tiene demostrado.
En el transcurso de un estudio publicado en ‘Psiquiatría de Archigeneracion’, los científicos examinaron los patrones de uso por parte de los pacientes de un servicio de emergencia psiquiátrica durante un período de siete años. Informaron de una disminución en el número de visitas al servicio de emergencia psiquiátrica durante los días y semanas previos a Navidad, con un aumento correspondiente de aproximadamente la misma magnitud después de las mismas.
¿Pero qué es la tristeza post vacaciones? Según la web Psycom, el síndrome posvacacional, estrés o depresión, puede afectar con fuerza después de un período de intensa emoción y estrés. La tristeza postvacacional comparte muchos de los mismos síntomas característicos de un trastorno de ansiedad o del estado de ánimo: insomnio, falta de energía, irritabilidad, dificultad para concentrarse y ansiedad. Pero a diferencia de la depresión clínica la angustia es de corta duración y no de largo plazo. Aunque a menudo se presta mucha más atención a la depresión que ocurre durante las vacaciones, la afección no es tan infrecuente.
Una de las posibles razones, puede estar en la retirada abrupta de las hormonas del estrés después de un evento importante, ya sea una boda, una fecha límite importante o las vacaciones de Navidad, que puede tener un impacto profundo en nuestro bienestar biológico y psicológico. También está en juego el efecto de contraste, una forma de sesgo cognitivo en el que la percepción de las diferencias aumenta o disminuye como resultado de la exposición a algo con características similares, pero cualidades clave diferentes. Es esencialmente la forma que tiene el cerebro de intentar restablecer el orden mientras se adapta entre experiencias marcadamente diferentes. Y la mitad del mes de diciembre es básicamente una gran desviación de su rutina normal, documenta la página web.
Otros motivos que la desencadenan van desde el peso considerable de afrontar situaciones y relaciones difíciles y mantener la calma durante los eventos navideños es otro posible factor en la depresión posterior a las vacaciones. También influyen los excesos navideños cargados de una dieta con abundantes azúcares y el consumo de alcohol.
¿Cuánto dura?
Esto varía de una persona a otra. Pero si después de un tiempo todavía no esperas con ansias los próximos eventos o sigues recordando las fiestas con tristeza en lugar de cariño, es hora de hablar con un profesional de la salud mental.
Para distinguir la ‘depresión de la cuesta de enero’ la web Verywellmind apunta los signos que la caracterizan tras la adrenalina de las pasadas fiestas:
-
-
- Ansiedad
- Desmotivación
- Irritabilidad
- Mal humor
- Estrés
- Depresión
- Insomnio
- Preocupación por el dinero
-
¿Qué hacer?
El Grupo de Terapia de Nueva York propone:
-
- Cuidar la dieta y el horario de sueño. Es más fácil manejar los sentimientos de tristeza y soledad cuando el cuerpo se siente bien. Después de la temporada navideña, llevar una dieta equilibrada y dormir bien por la noche son algunas de las mejores cosas que puedes hacer por tu cuerpo.
- Practicar técnicas de mindfulness y meditación, así como hacer ejercicio mejoran considerablemente los síntomas y reducen los niveles de estrés.
- Dedicarse tiempo. Durante la temporada navideña, es fácil estar tan ocupado que se pasan por alto las propias necesidades, lo que puede exacerba el agotamiento y puede resultar abrumador. Dedicar tiempo al cuidado personal puede ayudarte a disfrutar de momentos para uno mismo, dando a la mente y al cuerpo la oportunidad de descansar y relajarse.
- Rodearse de seres queridos. Los beneficios de rodearse de una red social de apoyo pueden ser de gran alcance y duraderos. De hecho, las investigaciones han demostrado que pasar tiempo con los seres queridos es bueno para nuestra salud física: aumenta nuestra inmunidad y longevidad. La interacción social también puede ayudar a combatir la soledad después de la temporada navideña, reducir el estrés y mejorar la perspectiva general.
- Buscar ayuda. Si los síntomas persisten o la depresión es elevada se debe recurrir a un especialista.
Temas:
- estrés
- Fiestas
- Psicología
Lo último en OkSalud
-
El Centro Médico Quirónsalud Valle del Henares cuenta con un nuevo Servicio de Medicina Estética
-
Belarra y Mónica García pactan ‘trocear’ la Ley ELA y sólo se financiará a pacientes más graves
-
Bienestar en el trabajo: los servicios más demandados son fisioterapia y atención psicológica
-
Dra. Victoria Núñez: «Las redes sociales han amplificado unos estándares de belleza que son irreales»
-
Adiós al cribado de colon: la microbiota puede convertirse en una prueba diagnóstica no invasiva
Últimas noticias
-
La asociación de la hermana del dirigente de Sumar financiada por el Gobierno está condenada por difamar
-
El PP carga contra Montero por sus críticas a los jueces mientras pacta con “condenados y fugitivos”
-
PP y Vox pedirán a Bernabé sus llamadas en la DANA y a Sánchez las órdenes de corte de carreteras
-
PSOE y Compromís dejan ‘Á Punt’ con la audiencia en mínimos pese a haber comprometido 54 de cada 100 €
-
Nada cambia en el tenis: Sinner es más número uno del mundo pese a no jugar por dopaje