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Recetas sin gluten

Receta de Fish & Chips caseros sin gluten

El conocido fish & chips es una receta que consiste en un pescado blanco rebozado y unas patatas fritas. Te enseñamos a hacerlo sin gluten

El Fish and Chips es un plato típico inglés que nos ofrece una combinación de sabores y texturas realmente mágica. La gracia de este plato está en la forma de rebozar el pescado que conseguirá de esta manera resaltar aún más su sabor y textura. En general se utiliza un pescado blanco para esta receta, podemos optar por un bacalao tiene pocas espinas y quedará muy suave por dentro y crujiente por fuera. Las patatas son las otras protagonistas de esta cena o comida rápida de lo más auténtica. Prepara los ingredientes y atrévete con este Fish and Chips sin gluten apto para todos, el resultado te enamorará.

Ingredientes:

Cómo preparar Fish and Chips caseros sin gluten

  1. Para esta receta una pieza clave serán las patatas. Las vamos a pelar y cortar en palitos del mismo tamaño. Al ser un plato muy sencillo debemos tener especial cuidado con estos ingredientes naturales, escogeremos los mejores y los cocinaremos a la perfección.
  2. Salpimentamos las patatas y vamos a realizar una técnica que las ayudará a ganar en textura y sabor. Las freímos dos veces. En una primera toma de contacto con el aceite las mantendremos 15 minutos a fuego medio. Retiramos las patatas y las volveremos a freír durante 3 minutos a fuego intenso, de esta manera conseguiremos una cocción mucho más conseguida. Las ponemos sobre papel de cocina absorbente.
  3. Seguimos con el pescado. Vamos a prepararle el rebozado. Este tipo de rebozados quedan increíbles con cualquier pescado y es uno de los secretos de su increíble sabor. Ponemos la cerveza fría con un poco de miel.
  4. Incorporamos la harina sin gluten y batimos todo con unas varillas hasta tener lista una masa perfecta para cubrir el pescado.
  5. Salpimentamos el bacalao que habremos cortado en trocitos del mismo tamaño. Le quitamos las espinas y cualquier pielecilla que tenga.
  6. Lo sumergimos en el rebozado y lo vamos friendo en abundante aceite. Es importante que esté muy caliente el aceite de lo contrario el rebozado se puede desprender y nos quedaría un plato muy poco agraciado.
  7. Vamos retirando el pescado a medida que esté cocinado. Lo ponemos sobre papel absorbente para que elimine el exceso de aceite. Podemos acompañar esta delicia con un poco de mayonesa casera o salsa de yogur estará increíble.