Opinión

Sánchez pincha en hueso

Convendría no caer en la trampa del Gobierno y sus terminales mediáticas y que no se entrara al juego de su burdo plan para tratar de dividir al PP en el asunto de la financiación autonómica. Sánchez es un consumado especialista en embarrar el terreno y en distorsionar la realidad: ahora se ha empeñado en romper la unidad del Partido Popular, reinterpretando torticeramente a Isabel Díaz Ayuso, que es su principal obsesión. Ayuso ha propuesto que los barones del PP acudan en bloque a negociar este asunto, sin que ello signifique -es de puro sentido común- que los presidentes autonómicos del PP no puedan reunirse con el presidente del Gobierno para abordar otros asuntos de interés de sus respectivos territorios. Faltaría más.

La estrategia de Pedro Sánchez, tras el ignominioso acuerdo con ERC que consagra la independencia fiscal de Cataluña, es clara: romper la unidad del PP tratando de engatusar a sus dirigentes autonómicos prometiéndoles más dinero. Todo un brindis al sol. Por supuesto que la estrategia es muy burda, pero  han bastado unas declaraciones de la presidenta madrileña para que el Ejecutivo se haya lanzado a trasladar la idea de una supuesta división en el PP que no es tal, como ha quedado de manifiesto. Isabel Díaz Ayuso pidió a los presidentes autonómicos del PP que no hagan el juego a Sánchez y no se sienten con él en reuniones bilaterales. Está claro que se refería al asunto nuclear de la financiación autonómica cuando dijo que «Sánchez quiere dividir a las autonomías para blanquear la ruptura territorial que se está pergeñando» y, además, «conseguir que la figura de su líder, Alberto Núñez Feijóo, se diluya», añadió. El PSOE es especialista en desviar la atención sobre las filas populares para tratar de sembrar discordia, pero lo expresado por Ayuso, que no es distinto de lo manifestado por Feijóo, es de puro sentido común. El Gobierno sigue sin explicar su pacto con los separatistas, pero no pierde un segundo en tratar de sembrar ruido en el PP.  Algunos pican y otros no, como los pimientos de Padrón.