RTVE, sanchismo en estado impuro: casi 1.000 millones de pasivo

La Radiotelevisión Estatal Pública es, quizá, uno de los reflejos más genuinos del sanchismo en descomposición, esto es, manipulación, sectarismo, ocultación de la realidad, despilfarro y suma de fracasos.

Si la RTVE de José Pablo López, el mismo personaje que pasó de meapilas oficial en Trece a sanchista furibundo (por cargo y precio), fuera una empresa privada hace tiempo que estaría en causa de disolución. Se sostiene por la morterada de millones (y creciendo) que los amos políticos enchufan a un medio que ha dejado claramente de ser de todos.

Resulta hilarante, con tendencia a chacota generalizada, la infantil presunción de intentar, a través de la red de Elon Musk, convencer de los triunfos rutilantes en audiencia cuando en muchos casos sus productos televisivos vienen dopados con dinero público. La Revuelta y lo de Belén Esteban son dos paradigmas de fracasos generalizados.

José Pablo López tiene que decir la verdad con nombres y apellidos en relación con quién se lleva a paladas el dinero que acabamos de pagar a través del IRPF y el Impuesto de Sociedades. Con nombres y apellidos, no camuflados a través de una sociedad que teóricamente produce elementos con el apoyo decisivo del poder político. ¡Nombres y apellidos!

Porque los datos financieros de la corporación son todo un poema, sobre todo, cuando se saca pecho y no se para de presumir sobre la nada. RTVE ha elevado un 34% su deuda con los bancos, deuda que alcanza ya la friolera de 740 millones. Insisto: si fuera una empresa privada estaría disuelta.

La RTVE de López se ha convertido en el brazo tonto del sanchismo; no guardan ni las formas en total ausencia de pudor informativo y opinativo. Resulta enternecedor ver cómo por vez primera en su historia las distintas izquierdas (que lo dominan todo) andan a hostia limpia. El Consejo de Informativos (sic) se ha lanzado a la yugular de Javier Ruiz y Jesús Cintora porque les han pasado por el sectarismo y hacen y deshacen en el reparto de prebendas a su costa.

RTVE será uno de los primeros problemas a los que tendrá que hacer frente Feijóo cuando arribe a Moncloa. Está por ver si tiene arrestos suficientes para poner coto al desvarío o, si por contra, decide compadrear, como en su momento hizo Rajoy. ¡Y no es este un asunto baladí!

Definitivamente, derogar la RTVE sanchista de JP&Deudos&Beneficiados (incluida, sorpresivamente, la productora «de derechas» (sic) La Cometa) debe ser una de las prioridades del próximo gobierno. Por higiene democrática y salud pública.

P.D. Lo ha dejado claro, Feijóo en sede parlamentaria. «Las coñas de RTVE». Despilfarrar dinero público es corrupción. Y la corrupción hay que perseguirla, ¿o no?