Opinión

Quien con proetarras se acuesta…

Por mucho que Pedro Sánchez haya corregido su postura y esté dispuesto ahora a enviar armas a Ucrania para combatir al Ejército ruso, lo cierto es que su supervivencia política depende de los enemigos de España, que también son los enemigos de Europa. El último ejemplo lo tenemos con la exigencia de Bildu al jefe del Ejecutivo para que otorgue asilo en España a los ucranianos que se nieguen a alistarse en las tropas para defender a su país de la invasión rusa. A los herederos políticos de ETA no les importa que casi un millón de ucranianos haya tenido que huir de la guerra, sino la situación de los ucranianos desertores. Juzguen ustedes el documento redactado por los proetarras de Otegui. Reza así: «Se insta al Ministerio del Interior a no discriminar por motivo de huida de reclutamiento militar y a reconocer las solicitudes de protección internacional y subsidiaria en curso». Para Bildu, lo urgente ahora es solucionar la situación de los ucranianos que no están dispuestos a participar en la guerra.

Es verdad que, con la boca pequeña, cuestionan la invasión ordenada por Vladimir Putin, pero a las primeras de cambio responsabilizan de la misma a la Alianza Atlántica, como si la culpa de que el presidente ruso haya ordenado aplastar a sangre y fuego a una nación vecina la tenga la OTAN. Esta gente, que siempre le ha bailado el agua a Moscú, es de una hipocresía insuperable. No es de extrañar que en el Parlamento europeo se haya  mostrado en contra de que Ucrania pueda entrar en la UE. Y el problema de fondo no es que Bildu se muestre como lo que es, sino que Pedro Sánchez se apoye en él para poder seguir instalado en La Moncloa. Luego se preguntan en el Gobierno por qué Biden no quiere saber nada de Pedro Sánchez. Como si el presidente de Estados Unidos no estuviera al tanto de quién gobierna en España y cuáles son sus socios preferentes.