La casta socialista sigue de fiesta mientras empobrece a los españoles

Mientras los españoles hacen milagros para llegar a fin de mes, la nueva portavoz del PSOE, Pilar Alegría, forma parte de la lista de ministros que disfrutan de una vivienda oficial a su disposición, con gastos de mantenimiento a cargo del Estado. Pese a que la socialista cobra 74.858,16 € al año, parece no ser suficiente ya que encima los ciudadanos deben pagarle con sus impuestos un inmueble de 320 metros cuadrados útiles, con tres estancias habilitadas, que se utilizan como habitaciones, según la información de OKDIARIO.

Además de la vivienda, los gastos de gestión y mantenimiento corren a cuenta de las arcas públicas. Así, según la información -que firma la subdirectora general de la Oficialía Mayor, Carlota Gloria Rubio Harcones- el gasto en electricidad ascendió en 2021 a 3.535,77 euros y el de agua, a 312,94 euros. Además se cuenta con un contrato menor de limpieza, a 12.601,21 euros anuales. Más que una ministra, una auténtica marquesa.

No es el único caso: Yolanda Díaz reside en una vivienda de 443 metros cuadrados en el Ministerio de Trabajo, y la ministra de Hacienda y actual vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, lo hace en un inmueble de 143,9 metros cuadrados, con cuatro habitaciones. Todo a cuenta del contribuyente, como mandan los cánones socialistas.

Los privilegios de la ministra Pilar Alegría demuestran que en este país ser socialista no tiene precio. Al mismo tiempo que fingen combatir los abusos de los poderes fácticos, ellos viven a cuerpo de rey con todos los gastos pagados. El cinismo llega al punto de que Alegría envía a su hijo a un colegio privado que cuesta más de 7.000 euros al año. Es decir, que mientras dice defender la escuela pública, su hijo se educa en el elitista Liceo Francés Molière de Zaragoza. Esta es la verdadera cara del socialismo: una élite rica, ególatra y que se niega a renunciar a sus privilegios.