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Parece una peli de terror pero es real: descubren en Australia una abeja con cuernos y le llaman ‘Lucifer’

  • Sofía Narváez
  • Periodista multimedia graduada en la Universidad Francisco de Vitoria, con un Máster en Multiplataforma por la Universidad Loyola. Editora en Lisa News con experiencia en CNN y ABC.

Las abejas suelen asociarse con una imagen amable, casi tierna, incluso caricaturesca. Pero el mundo real de la apicultura y de la entomología tiene giros inesperados, y esta vez han descubierto una especie que asusta un poco y la llaman Lucifer.

En Australia han identificado una abeja nueva que rompe cualquier idea previa: una megáquilida con cuernos en la cara, visitante habitual de la planta Marianthus aquilonaris, una flor que está en peligro crítico.

Descubren una abeja con aspecto casi terrorífico que vive junto a una planta en peligro crítico

Los autores del estudio describen a Megachile (Hackeriapis) lucifer como una especie nueva para la ciencia. Confirmaron su clasificación tras comparar ejemplares machos y hembras mediante barcoding genético y comprobar que no coincidía con ningún registro previo.

La encontraron en la región de Bremer Range, en los Goldfields del oeste australiano, durante un muestreo en noviembre de 2019 centrado en la flor Marianthus aquilonaris, una especie que sólo crece allí y que se incluye en la lista de plantas en peligro crítico.

El equipo recogió varios ejemplares durante el momento de máxima floración de otra planta local, Eucalyptus livida, que atraía a miles de insectos. Aun así, la presencia de esta nueva abeja destacó por su rareza.

Nunca apareció fuera de esa franja del paisaje, ni antes ni después de esas fechas. Tampoco hay registros en colecciones públicas o bases de datos genéticas. Esa ausencia de información ha reforzado la idea de que su distribución es mínima y su actividad es muy breve.

Según el estudio, esta especie podría depender de ciclos de floración muy concretos y de hábitats frágiles sometidos a la presión de la minería. Si la floración falla, o si el entorno desaparece, la abeja podría extinguirse.

Cómo es la apariencia de esta abeja y por qué tiene cuernos

La Megachile lucifer es una abeja pequeña y negra. La hembra mide unos 9,8 milímetros de largo y el macho ronda los 8,9. A simple vista no llamaría la atención, hasta que uno observa su rostro. Allí aparecen los cuernos que le han dado nombre.

Son dos estructuras triangulares, negras y puntiagudas que se orientan hacia arriba y hacia afuera. Miden cerca de un milímetro, pero resultan sorprendentemente visibles para un insecto de este tamaño.

Los machos no tienen cuernos. Esa diferencia tan marcada llevó a los investigadores a plantearse su función. El estudio recoge varias hipótesis: podrían servir para manipular materiales en el nido, defender recursos o incluso protegerse dentro de cavidades, como ya se ha observado en otras especies del mismo grupo.

El resto de su morfología sigue el patrón típico de las abejas del género Megachile. Presenta bandas claras en el abdomen y recoge polen con los pelos de la parte inferior del cuerpo, no en las patas traseras. Además, parece usar cavidades en madera o en troncos como lugar de anidación, lo que la vuelve especialmente vulnerable a la pérdida de árboles por incendios o por la extracción de recursos.

Los autores insisten en que el siguiente paso es buscar más poblaciones y entender qué papel desempeña esta abeja en la polinización de Marianthus aquilonaris. Sin esa información, protegerla será complicado. Y, como suele ocurrir con los polinizadores, cuando desaparecen ellos, también cae el ecosistema que los sostiene.