Naturaleza
Curiosidades

Hallazgo insólito: un estudio científico afirma que los caballos podrían prevenir incendios en el Mediterráneo

  • Ana López Vera
  • Máster en Periodismo Deportivo. Pasé por medios como Diario AS y ABC de Sevilla. También colaboré con la Real Federación de Fútbol Andaluza.

Especialmente en verano, las llamas vuelven a ser protagonistas en los paisajes del Mediterráneo. Con temporadas más largas y climas más extremos, la amenaza de los incendios forestales se intensifica año tras año.

La despoblación rural y la acumulación de vegetación seca agravan aún más el problema, empujando a científicos y gestores ambientales a buscar soluciones sostenibles.

En este contexto, una reciente investigación propone una idea innovadora: los caballos podrían desempeñar un papel fundamental en la reducción del riesgo de fuego.

Los caballos como herramienta ecológica en la gestión forestal mediterránea

Hasta hace poco, los esfuerzos por integrar la ganadería extensiva en la prevención de incendios se centraban casi exclusivamente en ovejas, cabras y ganado vacuno. Los caballos, considerados tradicionalmente como pastadores de hierba con poco impacto sobre la vegetación leñosa, habían quedado fuera del foco.

Sin embargo, según informa la Agencia SINC, un estudio liderado por investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y la Universidad de Lérida (UdL), con la colaboración de la Reserva Nacional de Caza de Boumort, la Fundación Miranda, la Asociación Forest Horses y la Universidad de Barcelona (UB) ha puesto en duda esa visión.

La investigación, publicada en Agroforestry Systems, revela que estos animales poseen una sorprendente capacidad de adaptación alimentaria que los convierte en aliados potenciales para la gestión del sotobosque mediterráneo.

Cómo la dieta de los caballos ayuda a prevenir incendios forestales

Para comprobarlo, el equipo científico analizó 50 muestras de heces de caballo y utilizó técnicas microscópicas avanzadas para reconstruir la composición vegetal de su dieta.

Gracias al análisis microhistológico y a modelos estadísticos de regresión Dirichlet, pudieron identificar con precisión qué especies consumían los animales en distintos entornos y condiciones.

Los resultados fueron reveladores: los caballos, aunque prefieren las gramíneas, pueden modificar su dieta con rapidez e incluir plantas leñosas como Quercus, Juniperus o Pistacia.

Esta flexibilidad los convierte en un recurso ecológico estratégico, ya que contribuyen a disminuir la carga de combustible inflamable y a mantener un paisaje en mosaico, clave para frenar la propagación del fuego.

Modelos de pastoreo con caballos para reducir el riesgo de incendios

El estudio contempló estos tres escenarios para medir la eficacia de los caballos en la prevención de incendios:

  1. Caballos asilvestrados, como los Przewalski de Boumort, que ayudan a mantener praderas abiertas de forma natural.
  2. Razas rústicas, como la Pottoka, que se adaptan progresivamente y consumen tanto gramíneas finas como matorrales más densos, reduciendo varios tipos de combustible vegetal.
  3. Caballos cruzados en pastoreo dirigido, que permiten intervenciones rápidas en zonas críticas donde se necesita reducir la vegetación de manera controlada.

Beneficios ambientales y rurales del pastoreo equino en el Mediterráneo

Los investigadores destacan que el uso de caballos ofrece ventajas ambientales, económicas y culturales. Favorece la conservación de razas locales, impulsa la actividad rural y fomenta la biodiversidad del paisaje.

Aunque aún se requieren estudios de largo plazo para medir con exactitud la reducción de biomasa inflamable, la evidencia apunta a que estos animales pueden integrarse en estrategias de prevención activa.

En un Mediterráneo cada vez más vulnerable al fuego, los caballos se perfilan como una alternativa natural para la prevención de incendios forestales.