Portugal y Suiza se miden este martes, a partir de las 20:00, en los octavos de final del Mundial de Qatar en el Estadio Lusail. Una plaza para cuartos estará en juego para enfrentarse al ganador del España – Marruecos, que jugarán antes. Una final para Cristiano Ronaldo en el que podría ser su último partido en un Mundial o la oportunidad para seguir avanzando hacia su último gran sueño.

Tras quedar como primero de grupo a pesar de perder en la última jornada ante Corea del Sur, la selección portuguesa afronta los octavos de final con las ganas y confianza de seguir avanzando rondas. Los lusos son una de las favoritas en este torneo y quieren demostrar sus credenciales en la primera fase del KO en Qatar.

Será una auténtica final para Cristiano Ronaldo, cuya titularidad para este partido todavía está en el aire. Un 70% de los votos en una encuesta en Portugal pedían la suplencia del astro luso y Fernando Santos, su gran valedor, afirmó en rueda de prensa que no le gustó nada el feo gesto de Cristiano al ser sustituido ante Corea.

Este es el último Mundial en la carrera de Cristiano Ronaldo y si Portugal cae eliminada podría ser su último partido en la historia de los Mundiales. Por ello Cristiano se tomará este partido como una final a vida o muerte, para demostrar también a su propia afición que todavía puede ser determinante en los grandes partidos a sus 37 años.

Un rival complicado

Por otro lado estará la siempre complicada Suiza, que en el pasado Europeo ya eliminó a Francia y que ha pasado como segunda de grupo tras ganar a Serbia y Camerún, y perder por solamente un gol ante Brasil. La selección de los Embolo, Sommer, Shaquiri o Xhaka son un hueso difícil de roer y también quieren estar en cuartos.

La última vez que se vieron las caras ambas selecciones fue el pasado mes de junio en la Nations League. Los suizos ganaron aquel partido 1-0 ante Portugal gracias a un gol de Seferovic en el primer minuto de partido. Casualmente en aquel partido, Cristiano no estaba convocado.

El colegiado del partido será el mexicano César Arturo Ramos, mismo árbitro que en el Portugal – Uruguay de los octavos de final de Rusia 2018. En aquel partido los portugueses cayeron eliminados y Cristiano terminó desquiciado y viendo una amarilla en el descuento por protestar.