Subaru WRX STi, la evolución del Impreza

Cuando una marca japonesa, Subaru en este caso, se propone hacer un deportivo, hay muchas papeletas para que salga un coche realmente divertido. Y de ahí a que este modelo adquiera una fama que le haga perdurar con el paso de los años, hay un paso. Es el caso del Subaru WRX STi, conocido desde siempre como Impreza.

¿Quién no recuerda el mítico coche con el que Colin McRae se disputaba con Carlos Sainz los mundiales de rallys? Incluso el piloto madrileño llegó a pilotar este coche durante una temporada, precisamente con el malogrado piloto escocés como compañero de equipo.

Han pasado los años y las generaciones, pero lo cierto es que el espíritu de uno de los coches más ‘brutos’ que ha dado la historia, sigue estando intacto. Vamos a hacer un breve repaso de su historia.

Subaru Impreza WRX STi, primera generación

El Subaru Impreza llegó en 1992, pero no fue hasta dos años después cuando la marca japonesa lanzó la versión WRX STi, que en esta primera generación contaba con un motor de 2 litros con turbo, capaz de llegar a alcanzar una potencia de hasta 280 CV. Como veis, ciertos rasgos, especialmente la llamativa toma de aire del capó, siguen vigentes hoy en día, aunque resulta obvio que el paso de los años ha hecho mella en la espectacularidad del primero de los Impreza.