Porsche 911 R, el adiós de los atmosféricos

La última creación de Porsche crea sensaciones contradictorias. Hablamos del 911 R, un auténtico espectáculo de deportivo que sin embarco provoca un sentimiento de tristeza, y es que con él se cierra una época, la de los motores atmosféricos que a tantos seguidores de la marca alemana han entusiasmado.

El nuevo Porsche 911 R nace con el objetivo de conmemorar el 911 R de 1967, uno de los coches de carreras más exitosos de la marca. Se basa en la carrocería de la actual generación, pero previa al restyling, lo cual por cierto no le resta ni un ápice de interés. Además de los paragolpes y el difusor específico, este 911 tan especial añade un nuevo splitter delantero. Además se añaden un nuevo capó delantero y unos pasos de rueda hechos en carbono, mientras que el techo es de magnesio y las ventanillas laterales y la luna trasera son de plástico. El resultado es un importante ahorro de peso que viene muy bien al conjunto.

Bajo su piel Porsche ha optado por el motor de 4 litros y 500 CV que ya conocemos del GT3 RS, aunque en esta ocasión solamente podremos acoplarle una caja de cambios manual de seis velocidades, algo que los más puristas de la conducción agradecerán. Además, su relación de cambio cerrada ayuda a que el comportamiento de la mecánica sea más deportivo si cabe.

Todo esto se traduce en el asfalto en una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos, mientras que su velocidad punta alcanza los 323 km/h. Obviamente, este torrente de poder tiene su reflejo en el consumo, donde Porsche ha homologado para el 911 R 13,3 l/100 km, cifra que se quedará en una broma si sacamos todo el potencial que tiene escondido la bestia germana.

Respecto al 911 GT3 RS, el Porsche 911 R que estamos presentándote equipa los mismos brazos de suspensión y amortiguadores, mientras que el escape es de titanio y los frenos equipan discos cerámicos.

Nos queda por comentar el interior. Cada una de las 991 unidades -cifra en honor de la generación del 911 de la que hablamos- de este vehículo contarán con unos asientos tipo bacquet de carbono cuyo tapizado está diseñado en honor al modelo de los años 60. Porsche también ha instalado un nuevo volante específico y detalles en aluminio y carbono a modo de contraste. Como podrás imaginar, carece de plazas traseras, mientras que detalles no destinados a correr lo más que se pueda como el aire acondicionado y la radio son opcionales. ¿Su precio? 217.000 euros.