7 formas absurdas de perder una carrera

Quien haya hecho sus pinitos en el mundo de la competición de motor sabe que es un deporte mucho más duro y sacrificado de lo que parece. Es por ello que dejar escapar una victoria segura por un detalle absurdo duele más de lo normal. Y si no que se lo pregunten a nuestros protagonistas de hoy, encabezados por un Lewis Hamilton que ayer regaló el GP de Mónaco que había controlado desde el principio. Al menos al actual campeón del mundo de Fórmula 1 le queda el consuelo de que no fue su culpa…

Lewis Hamilton: GP de Mónaco 2015

Lewis Hamilton solo había ganado hasta ayer el GP de Mónaco de 2008. Y así va a seguir siendo durante al menos un año más. Ayer iba camino de conseguirlo por segunda vez tras una actuación impecable. Sin embargo, a pocas vueltas del final salió un Safety Car a consecuencia del brutal accidente de Max Verstappen y se lió la marimorena. En Mercedes creyeron tener la suficiente ventaja como para que Hamilton cambiase de ruedas y saliese a la pista de nuevo como líder. Nada más lejos de la realidad. El piloto inglés se encontró con Rosberg y Vettel delante de él tras regresar de boxes. Acabó finalmente tercero, y su cara en el podio era de las que no se olvidan.