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¿Qué es el síndrome del gato paracaidista y cómo puedes evitarlo?

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

El síndrome del gato paracaidista es uno de los principales motivos de visita al veterinario. Se denomina así cuando un gato se lanza al vacío desde una ventana o balcón y sufre lesiones a consecuencia de la caída. Se dice que los gatos tienen siete vidas, pero en realidad se trata de un mito.

Ahora bien, es cierto que los gatos tienen una capacidad innata de caer sobre sus cuatro patas independientemente de cuál sea su postura antes de precipitarse. Esto ocurre porque el peso de su cuerpo está distribuido de manera armónica y simétrica, de tal forma que el centro de gravedad coincide exactamente con el centro geométrico de su cuerpo. Esta es la razón por la que, en la gran mayoría de casos, caen sobre sus cuatro patas. Pero no siempre lo consiguen, sobre todo cuando caen desde poca altura, porque no tienen tiempo de recolocarse.

Síndrome del gato paracaidista: todo lo que debes saber

Los gatos son muy curiosos por naturaleza, así que hay que tener mucho cuidado con ellos porque pueden caerse por la ventana o por el balcón a la mínima de cambio. Es mucho más frecuente que se caigan gatos menores de dos años y que no están esterilizados, aunque en realidad ningún minino está a salvo.

Las lesiones provocadas por este tipo de caídas afectan en la mayoría de los casos al abdomen, el tórax, la columna vertebral y la cabeza. Los casos más graves son los de gatos que se han precipitado desde poca altura, porque apenas tienen tiempo para recolocarse y caer sobre las cuatro patas.

Según han revelado diversos estudios, su «capacidad de supervivencia» se limita a cinco o seis pisos. Por encima de esta altura, la mayoría de caídas suelen ser mortales.

¿Cómo actuar si el gato se ha caído desde la ventana o el balcón? Como resulta lógico, debes atenderle de inmediato. Recógelo con una manta o una toalla y, aunque parezca que está bien, llévalo de inmediato a una clínica veterinaria para que le hagan un chequeo.

Si ha salido ileso de la caída y puedes llevártelo a casa, dale su espacio. El hecho de haberse caído es una experiencia muy traumática y que asusta mucho a los gatos, así que es importante que no lo fuerces y que sea él el que vaya poco a poco recuperándose a su ritmo. En unos días o semana habrá vuelto a su actividad y comportamiento normal.