Madrid
ASALTO AL PODER JUDICIAL

Ayuso: «Pensaba que Sánchez iba a anunciar su dimisión, pero ha dado una nueva patada hacia delante»

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha lamentado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no haya presentado este martes su dimisión después de que el Tribunal Constitucional parara la pasada madrugada su asalto al Poder Judicial.

«Pensaba que cesaría inmediatamente al ministro de Presidencia -Félix Bolaños- o incluso dimitiría el propio presidente, pero no. Es una patada hacia delante para volver a separar y enfrentar al Parlamento con la Justicia», ha manifestado Díaz Ayuso pocos minutos después de que Sánchez compareciera en una rueda de prensa sin periodistas ni preguntas en el Palacio de la Moncloa para anunciar que acatará la decisión del TC, al tiempo que ha adelantado que adoptará «medidas precisas» para someter a los jueces.

«Sánchez ha salido a volver a decir que en España hay que elegir entre la democracia y los jueces, algo que es gravísimo y que se ha visto en otros países cuyos ciudadanos han abandonado sus territorios para venir aquí y encontrarse de nuevo con la misma», ha indicado la presidenta en unas declaraciones tras visitar Las Rozas Village.

«Esto es lo que tenemos por delante y, desde luego, nosotros desde la Comunidad de Madrid haremos todo lo contrario, que es defender la separación de poderes, la libertad y el Estado de Derecho, que es el último recurso que le quedan a los ciudadanos cuando los proyectos totalitarios cogen fuerza», ha apostillado.

Por su parte, Sánchez ha aprovechado su intervención para cargar con dureza contra el Partido Popular por no facilitar la renovación del CGPJ, al que ha acusado de llevar «cuatro años bloqueando las instituciones». El presidente ha asegurado que se trata de «un bloqueo cuyo único objetivo es mantener la composición anterior más favorable a sus intereses». Un «propósito que persigue el PP de retener por métodos espurios el poder que le quitaron las urnas».

El jefe del Ejecutivo ha pedido «serenidad y confianza» a los ciudadanos que en su opinión «asisten desconcertados» a lo que está ocurriendo. Pedro Sánchez les ha garantizado que «el Gobierno cumplirá con la legalidad» porque «España es una de las grandes democracias europeas». Ha afirmado que «comprendo la indignación de muchos demócratas de sentirse vulnerados». «En momentos de incertidumbre se necesita serenidad y firmeza», ha zanjado Sánchez.

La de ese martes es la primera reacción del presidente del Gobierno a la resolución del Tribunal Constitucional. Anoche, pese a que en algún momento se llegó a poner sobre la mesa la posibilidad de que fuera él quien saliera a fijar la opinión del Ejecutivo, finalmente se optó por obligar al ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, a «quemarse» y dar la cara «de su fracaso». Sánchez y su equipo han cargado sobre él la responsabilidad de lo ocurrido. Algunos ya lo dan por amortizado.