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Dra. Berezo: «Consumir carne de vacuno ayuda a mantener una piel radiante y saludable»

La médico estética de la Clínica EB nos da las claves para tener una piel jugosa y bien nutrida

La belleza y el bienestar están íntimamente ligadas a los cuidados progresivos que nos demos a lo largo de nuestra vida. La Dra. Elena Berezo, médica estética en la Clínica EB, acostumbrada a cuidar del bienestar de sus pacientes cada día, aconseja que las claves para tener un buen aspecto, por dentro y por fuera, debemos «llevar una dieta equilibrada, ingiriendo todos los nutrientes que nuestro organismo necesita, sin olvidar las proteínas que nos brinda la carne de vacuno. Ya que ésta es rica en aminoácidos, como la glicina y la prolina, que son cruciales para la producción de colágeno».

Cuando alguien va a verla, además de los tratamientos innovadores que aplica, ¿qué consejos les da para conseguir un aspecto saludable general?

Además de ofrecer tratamientos médicos estéticos, también ponemos el foco en un trabajo integral. Por ello, trasladamos a los pacientes la importancia de mantener una dieta equilibrada, un espacio nutricional donde no nos falte ni suprimamos ningún nutriente. Y también les recomendamos hidratarse adecuadamente, practicar ejercicio regularmente, dormir bien o manejar el estrés de la mejor manera posible.

¿Podemos hacer una pequeña guía para que no nos dejemos ningún detalle?

Lo primero que tenemos que tener es una buena hidratación, beber agua suficiente como única forma de mejorar la elasticidad de la piel y ayudar a eliminar toxinas. La dieta siempre equilibrada, así que recomiendo consumir una variedad de alimentos ricos en nutrientes, como frutas y verduras frescas, que aportan antioxidantes, vitaminas y minerales. Ingerir, además, proteínas de calidad, que residen en la carne de vacuno, y que son vitales para la reparación y regeneración celular. Sin olvidar la ingesta de ácidos grasos esenciales, como los presentes en pescados y nueces.

«Las proteínas de la carne de vacuno tienen múltiples efectos positivos en nuestra piel»

¿Cómo actúan los alimentos en nuestra piel? ¿Cómo impacta la ingesta de proteínas, como las de la carne de vacuno? 

Los alimentos, especialmente las proteínas de la carne de vacuno, tienen múltiples efectos positivos en nuestra piel. La carne de vacuno es una fuente excelente de proteínas de alta calidad, que son esenciales para la construcción y reparación de los tejidos. Estas proteínas ayudan a mantener la firmeza y elasticidad de la piel.

Además, la carne de vacuno es rica en aminoácidos, así como una buena fuente de zinc, un mineral que juega un papel importante en la curación de heridas y en la producción de nuevas células de la piel. El zinc también ayuda a controlar la producción de sebo, lo que puede prevenir el acné. El hierro presente en la carne de vacuno es esencial para la oxigenación de los tejidos, lo que mejora la salud y el aspecto de la piel al mantenerla vital y radiante.

También es rica en varias vitaminas del grupo B, como la B12, que es importante para la producción de glóbulos rojos y la salud general de la piel. Estas vitaminas ayudan a mantener un tono de piel saludable y pueden prevenir la palidez. Aunque la carne de vacuno es principalmente fuente de proteínas, algunas partes contienen ácidos grasos que pueden contribuir a la salud de la piel. Estos ácidos ayudan a mantener la barrera lipídica de la piel, mejorando la hidratación y la suavidad.

¿Cree que podemos con nuestra alimentación estimular la producción de colágeno? 

Sí, podemos estimular la producción de colágeno a través de nuestra alimentación, y la carne de vacuno juega un papel importante en este proceso. Al consumir carne de vacuno, especialmente partes que contienen tejido conectivo, como los cortes más gelatinosos (por ejemplo, el jarrete o el osobuco), se obtiene colágeno directamente. Esto puede contribuir a aumentar los niveles de colágeno en el cuerpo.

Incorporar carne de vacuno en la dieta no sólo proporciona aminoácidos esenciales necesarios para la producción de colágeno, sino que también aporta nutrientes clave como zinc, hierro y vitaminas del complejo B, todos ellos fundamentales para mantener la piel saludable y promover la síntesis de colágeno. Desde la clínica EB, os recomendamos una alimentación rica y variada que incluya carne de vacuno, ya que puede ser beneficiosa para la salud de la piel y el bienestar general.

En resumen, podemos decir que la carne de vacuno aporta una serie de beneficios positivos para la piel, gracias a su contenido en proteínas de alta calidad, colágeno, minerales esenciales como zinc y hierro, y vitaminas del grupo B. Estos nutrientes son fundamentales para mantener la salud, la elasticidad y la apariencia radiante de la piel, ayudando a prevenir signos de envejecimiento y a promover una piel más clara y saludable. Incorporarla de manera equilibrada en la dieta puede ser un gran aliado para la salud cutánea.

«Una dieta equilibrada aporta los nutrientes necesarios para mantener la piel, el pelo y los músculos en buen estado»

¿Cómo afecta una buena alimentación y un tratamiento estético en nuestra salud física y psíquica?

Una buena alimentación combinada con un tratamiento médico estético tiene un impacto positivo y profundo tanto en nuestra salud física como psíquica. Físicamente, una dieta equilibrada aporta los nutrientes necesarios para mantener la piel, el pelo y los músculos en buen estado, optimizando los efectos de los tratamientos estéticos y mejorando la apariencia general.

En el aspecto psíquico, vernos bien refuerza nuestra autoestima y nos hace sentir más seguros, lo que tiene efectos positivos en el estado de ánimo y las relaciones personales. En Clínica EB, buscamos ese enfoque integral, ya que el cuidado físico a través de una buena alimentación y tratamientos estéticos también contribuye al bienestar emocional.

¿Cuáles son los problemas que más ve en su consulta cuando hablamos de alimentación?

Observamos una alimentación desequilibrada, muchos pacientes llevan dietas ricas en alimentos procesados, azúcares y grasas saturadas, lo que puede llevar a deficiencias nutricionales y afectar su salud y apariencia. También vemos deshidratación, no toman agua suficiente, lo que deja una piel opaca y menos elástica. No ingieren suficientes frutas y verduras, hay falta de estos alimentos, lo que limita la ingesta de antioxidantes y nutrientes esenciales. Ambas cruciales para una piel sana.

Muchos pacientes, además, tienen patrones de alimentación desordenados, como saltarse comidas o picar en exceso por la noche, lo que puede afectar su metabolismo y energía. Eso sumado al estrés alimentario, es decir, a menudo la relación con la comida se ve afectada por el estrés, llevando a comer emocionalmente o a desarrollar hábitos poco saludables. Observamos también deficiencias de vitamina D, vitamina B12 o hierro, lo que también puede tener un impacto en la piel, el cabello y la salud en general.

Estos problemas no sólo afectan la estética, sino que también pueden tener repercusiones en la salud física y emocional de los pacientes. Por eso, siempre trato de ofrecerles un enfoque educativo y recomendaciones prácticas para mejorar su alimentación y, en consecuencia, su bienestar general.

«Una piel opaca o con granos puede indicar una dieta alta en azúcares y carbohidratos refinados»

¿Es posible ver cómo nos estamos alimentando sólo con ver algunos detalles de nuestro exterior? 

Sí, es posible obtener algunas pistas sobre la alimentación de una persona observando ciertos detalles en su apariencia y salud. Por ejemplo, una piel opaca o con granos puede indicar una dieta alta en azúcares y carbohidratos refinados; mientras que una piel radiante suele reflejar una ingesta adecuada de frutas, verduras y grasas saludables.

El cabello quebradizo o con caída puede ser señal de deficiencias nutricionales, como falta de proteínas, hierro o ácidos grasos esenciales. Un cabello brillante y saludable generalmente sugiere una buena nutrición. Las uñas débiles, quebradizas o con manchas pueden indicar problemas en la dieta, como deficiencias de biotina, zinc o hierro; mientras que unas uñas fuertes y saludables suelen ser un reflejo de una alimentación equilibrada.

La aparición de ojeras o signos de fatiga, por ejemplo, puede estar relacionada con una dieta pobre en nutrientes, deshidratación o falta de sueño, lo cual está vinculado a hábitos alimenticios inadecuados. Mientras que los cambios drásticos en el peso pueden ser indicativos de una alimentación inadecuada. Y es que el sobrepeso puede ser el resultado de una dieta rica en calorías vacías, mientras que la pérdida de peso involuntaria puede señalar deficiencias nutricionales o problemas de salud.

¿Qué consejo no se le olvida jamás de dar a sus pacientes antes de salir de su consulta? 

El consejo que siempre doy a mis pacientes antes de salir de la consulta es que la constancia en el cuidado diario es clave para obtener y mantener resultados duraderos. Les recuerdo la importancia de una buena rutina de cuidado de la piel, protección solar diaria y una alimentación equilibrada que apoye la salud desde dentro. Creo que los pequeños hábitos diarios marcan una gran diferencia en los resultados de cualquier tratamiento médico estético.