Investigación

González reconoce que se pagaban comisiones en la expansión del Canal de Isabel II por Sudamérica

Ignacio González ingresaba en la prisión madrileña de Soto del Real por el caso Lezo el pasado 21 de abril tras declarar cerca de 3 horas ante el entonces juez instructor, Eloy Velasco, y los fiscales del caso. Durante su comparecencia reconoció que era «posible» que se hubieran pagado comisiones por la compra de empresas en Sudamérica durante la expansión del Canal de Isabel II.

OKDIARIO publica en exclusiva la declaración que prestó el expresidente de la Comunidad de Madrid antes de ser encarcelado, acusado de presuntos delitos de malversación de caudales públicos, fraude, organización criminal, prevaricación, falsificación de documentos, fraudes en las transacciones internacionales, cohecho o blanqueo de capitales.

En su comparecencia, era preguntado por los representantes del Ministerio Público sobre la compra de la filial brasileña, Emissao, por 21 millones de euros en 2013, cuando un año después su valor apenas superaba los 5 millones. El exdirigente del PP aseguró que no dio «ninguna orden» al exgerente del Canal, Adrián Martín, para comprarla: «Todo fue un proceso interno y ya no estaba en el Canal», señalaba.

«Yo sabía que iban a comprar la empresa brasileña, pero no tenía que pasar por el Consejo, no sabía las particularidades. No tenía especial interés en que esta operación saliera adelante. Desconocía que se compró Emissao a través de una empresa uruguaya y que se pagaron comisiones en Suiza» añadía. Precisamente, los investigadores están convencidos de que González se benefició de dichas comisiones transferidas al país helvético

González negaba también haber tenido «ingresos no declarados a la Agencia Tributaria, divisas y sociedades fuera de España» o dinero ahorrado escondido junto a su mujer, Lourdes Cavero.

Posteriormente, era preguntado sobre el informe del despacho de abogados Cuatrecasas en referencia a la compra de la filial colombiana Inassa en 2001 por el Canal de Isabel II durante la presidencia de Alberto Ruiz Gallardón en la Comunidad de Madrid. González dice que en dicho informe no se recogen supuestos «sobrecostes» en la operación, sino «beneficios fiscales».

También niega que esta sociedad fuera una «estructura idónea para delinquir o desviar dinero» y que si lo hubiera pensado «lo hubiera puesto en conocimiento de los tribunales». «Yo no he tapado nada» y añadía que no tenía «certeza» de que alguien se hubiera beneficiado personalmente con la compra.

En este contexto, insistía en que la adquisición de Inassa a través de la sociedad panameña, Aguas de América, tenía como objetivo conseguir «beneficios fiscales» y que siguieron pagando durante su presidencia el crédito asignado a la compra para «no dañar la reputación» del Canal de Isabel II: «No me callé para tapar al PP».

Sobre su relación con el expresidente de Inassa, Edmundo Rodríguez Sobrino, reconoce haberse reunido con él «para pedirle explicaciones» tras aparecer éste implicado en los ‘Papeles de Panamá’.

Ignacio González. (Foto: EFE)

Respecto a las ampliaciones de capital de las empresas del Canal en Sudamérica y la compra de otras sociedades, aseguraba que «si no pasaron por el Consejo de Administración no las recordaba». «Al Canal le dedicaba un día a la semana» apostillaba.

A lo largo del interrogatorio, también era preguntado por las operaciones efectuadas por su hermano Pablo González, exdirectivo de Mercasa y su cuñado, asegurando que «no conocía» las operaciones empresariales de sus familiares. Además admitía, haber intercambiado «préstamos familiares».

Sobre el viaje a Colombia en 2008 en el que fue espiado junto a Rodríguez Sobrino y otros cargos del Canal, González aseguraba que fue «un viaje oficial para reunirse con el presidente de la República para hablar sobre la situación allí y los problemas que tenían las compañías con el suministro de agua».