Investigación
CENTRO NACIONAL DE INTELIGENCIA

Los agentes del CNI apoyan unánimemente a Paz Esteban: «La quieren destituir por cumplir con su deber»

Los agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que estuvieron presentes en la celebración del aniversario del organismo apoyaron de manera unánime a su directora, Paz Esteban. El pensamiento interno generalizado entre los agentes es que desde el Gobierno de Pedro Sánchez quieren destituirla “por cumplir con su deber”. Tal y como ha podido saber este periódico, el apoyo fue tan masivo que, a pesar de la cancelación del gran acto que estaba previsto, muchos agentes fueron hasta la sede central de Madrid para trasladar “apoyo y ánimo” a su jefa.

Estaba previsto que el CNI celebrara el pasado 6 de mayo una gran celebración como consecuencia del cumplimiento del veinte aniversario del Centro. Dicho acto iba a tener lugar en la sede central de La Casa, ubicada en la carretera de La Coruña de Madrid. Las invitaciones, que eran nominativas y estaban firmadas por la directora, fueron enviadas en enero. También estaba previsto que acudiera Su Majestad El Rey, entre otras personalidades. Sin embargo, la crisis originada por las tensiones del Ejecutivo con sus socios separatistas en torno al presunto espionaje de Pegasus truncaron los planes y el acto se tuvo que cancelar.

Paz Esteban trabaja en el CNI desde 1983.

A pesar de la anulación de la festividad, esto no impidió que el CNI llevara a cabo un pequeño acto reivindicativo entre los agentes que trabajan en esas instalaciones. También acudieron otros agentes destinados en otras ubicaciones madrileñas, que fueron hasta la sede central ex profeso. El resultado fue una muestra de apoyo unánime a Paz Esteban, hoy en el punto de mira del Gobierno. Un señalamiento que se está llevando a cabo con filtraciones que giran en torno a su cese encubierto de falsa dimisión. Una situación incómoda que contrasta con las ovaciones que la directora recibió el pasado viernes.

El acto tuvo dos partes: el discurso de la directora y el homenaje a los caídos del Centro. Las palabras de Paz Esteban, que fueron pronunciadas frente a la cúpula de la organización, dieron lugar a un terremoto de aplausos intensos e interminables que provocaron una enorme emoción de la directora. El apoyo a su trabajo es unánime. Al término del acto, se llevó a cabo un homenaje a Los héroes del CNI, los agentes asesinados en Irak en 2003. Una celebración que llevaba de manera implícita el recuerdo al resto de fallecidos en acto de servicio, cuyas caídas nunca han trascendido públicamente.

Monumento de homenaje a los agentes del CNI asesinados en Irak en 2003.

Uno de los invitados a este gran acto cuenta a OKDIARIO el sentimiento de malestar e incredulidad interno. “Se quieren cargar a Paz Esteban por cuestiones meramente políticas, por cumplir con su deber, que es realizar los objetivos que marca el Gobierno en la hoja de ruta denominada Directiva de Inteligencia, y velar por la seguridad de España y los españoles”. Esta persona conoce a la directora desde el primer día que entró en la institución a comienzos de los años ochenta. “Tenía veintipocos años y ya entonces era muy reservada y discreta. Es una gran profesional y lo único que ha hecho es hacer su trabajo”.

En efecto, Paz Esteban López (Madrid, 1958) ingresó en el CESID -el antecedente del actual CNI- en 1983, año clave, porque es desde el que las mujeres pueden ingresar en La Casa. Fue nombrada directora de los servicios secretos en febrero de 2020, aunque ya ejercía como tal de manera interina desde julio de 2019. Las personas que la conocen la describen como una agente “dinámica y resolutiva” cuyos valores al frente de la institución son la lealtad, disciplina, discreción, el espíritu de sacrificio y el sentido del deber.

La crisis de Gobierno provocada por las tensiones entre Pedro Sánchez y sus socios catalanes tras el uso del presunto espionaje con Pegasus a líderes independentistas ha sumido al CNI en el centro de multitud de filtraciones inexactas y, en muchas ocasiones, falsas. En los últimos días, Moncloa está filtrando el cese inminente de Paz Esteban, a pesar de que no hay motivos objetivos para que haya un relevo interno. Por su parte, la ministra de Defensa, Margarita Robles, respalda absolutamente la labora de la directora.

Esta tensión está influyendo directamente en el Centro y en la obligación de sus funcionarios, los 3.500 servidores que trabajan en la sombra por la seguridad del Estado, de vivir y trabajar en la más completa y absoluta cultura del anonimato. Durante estos últimos días, los agentes están siendo sometidos a una presión extra que tienen que compatibilizar con su ya de por sí arduo trabajo. “Nunca bajamos la guardia. Nuestro éxito es la normalidad. Trabajamos discretamente para proteger el futuro. Para que nuestro país sea cada día un poco mejor”, rezan algunos de sus lemas.