Internacional

Tusk inicia su nuevo mandato advirtiendo a Londres: «La UE no se dejará intimidar por amenazas en el Brexit»

El pasado jueves su puesto fue ratificado, el presidente del Consejo Europeo, el polaco Donald Tusk, vio cómo era casi unánime el apoyo de los jefes de Estado y de Gobierno para que siguiera liderando sus cumbres. Sólo su propio país, por una cuestión de rencillas de política interna, lo repudió. Y con esa fuerza, uno de los llamados a encabezar las posiciones políticas comunes en el proceso de negociaciones del Brexit ha inaugurado su nuevo mandato dejándole claro a Londres que «la Unión no va a dejarse intimidar por amenazas» que vengan del Gobierno de Reino Unido.

Y es que el pasado enero, la primera ministra británica, Theresa May, advirtió en un discurso que su país tiene por objetivo «irrenunciable» salir de la UE en dos años «haya o no un acuerdo con las instituciones europeas».

Para Tusk, que se dirigía este miércoles al pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo, «un escenario ‘sin acuerdo’ sería malo para todos y especialmente para Reino Unido».

«No nos dejaremos intimidar por las amenazas, puedo asegurarles que simplemente no funcionarán», ha agregado el presidente del Consejo, criticando que la idea de una eventual falta de acuerdo considerada como «buena para Reino Unido y mala para la UE» gane terreno como una «forma de amenazas».

En aquella alocución, May dejó claro que la determinación de us Gobierno es firme: «Aunque estoy segura de que se puede llegar a un acuerdo positivo, tengo igualmente claro que es mejor para Reino Unido una falta de acuerdo que un mal acuerdo», aseguró.

Reacción del Gobierno británico

Tras las palabras de Tusk, el ministro británico para el Brexit, David Davis, ha reiterado que la intención de su país es conseguir «algo que sea en el interés de todos». «No estamos intentando amenazar a nadie», ha añadido.

El Gobierno de Downing Street debe notificar oficialmente antes de finales de marzo su decisión de convertirse en el primer país en abandonar la UE en 60 años de proyecto europeo, abriendo la puerta a las negociaciones de divorcio.

Entre los temas peliagudos de estas conversaciones, que podrían durar dos años, se encontraría la futura factura de salida de Reino Unido, el derecho de los ciudadanos europeos en Reino Unido y la frontera entre Irlanda y la británica Irlanda del Norte.

El Brexit podría tener lugar en 2019, con acuerdo o sin él, pero para el presidente del Consejo esto no significa que las puertas del bloque se cerrarán a Reino Unido tras su marcha. De hecho, el presidente del Consejo ha cerrado el asunto del Brexit en su discurso mostrando la zanahoria la final del palo: «La puerta de la UE siempre estará abierta para nuestros amigos británicos», apuntó Tusk.