Internacional

El Papa Francisco padece una inflamación pulmonar y reza el Ángelus desde su residencia

El Papa Francisco ha rezado este domingo el Ángelus desde la capilla de su residencia de la Casa Santa Marta del Vaticano porque, como ha señalado, padece «una inflamación pulmonar» consecuencia de un ligero estado gripal.

«Hoy no puedo mirar por la ventana para ver el Ángelus porque tengo este problema de inflamación pulmonar. La reflexión será leída por Monseñor Braida que los conoce bien porque es quien los hace y siempre los hace tan bien. Muchas gracias por su presencia», ha comentado el Papa.

Al Papa se le ha podido ver sobre su mano una vía para facilitar la medicación que se le está suministrando y durante la lectura del Ángelus se le ha escuchado toser en alguna ocasión. «Buen domingo y no dejéis de rezar por mí», ha pedido el pontífice antes de despedirse.

El Papa Francisco se sometió este sábado a una tomografía computarizada (TAC) en el hospital Gemelli Isola de Roma para descartar el riesgo de complicaciones pulmonares. La prueba dio resultado negativo y regresó a su residencia.

Problemas de salud del Papa Francisco

El pasado 6 de noviembre el Papa afirmó en un encuentro con rabinos europeos que no estaba bien de salud, motivo por el que no leyó el discurso que tenía previsto para la mencionada cita, si bien mantuvo los actos previstos en su agenda para esa jornada.

«Os saludo a todos y os doy la bienvenida. Gracias por esta visita que tanto me gusta. Pero sucede que no estoy bien de salud y por eso prefiero no leer el discurso, sino entregárselo y que se lo lleven», dijo entonces.

En junio tuvo que someterse a una intervención quirúrgica para que le trataran de una una hernia incisional encarcelada que le provocaba síndromes suboclusivos en el estómago. En la operación le encontraron también «adherencias tenaces» en algunas partes del «intestino y del peritoneo parietal», según explicó el cirujano que le operó.

Unos meses antes, en marzo de 2023, el Pontífice tuvo que ingresar en el hospital Policlínico Gemelli de Roma debido a una infección respiratoria que requirió, según la Oficina del Vaticano, de varios «días de tratamiento médico hospitalario adecuado».