Internacional

Llega la primera demanda de una víctima del 11S contra Arabia Saudí tras fracasar el veto de Obama

El pasado miércoles les contábamos que Obama había sufrido el primer revés al usar su veto presidencial, y el decreto que intentó parar ya está en funcionamiento. Trataba de evitar Obama que se aprobase una ley que permitía a las víctimas de los atentados del 11S en EEUU demandar a Arabia Saudí, y ha llegado ya la primera demanda.

Stephanie DeSimone, cuyo esposo, el comandante de la Marina de Estados Unidos Patrick Dunn, falleció en los atentados del 11 de septiembre de 2001, ha presentado una denuncia contra el reino de Arabia Saudí por su supuesta complicidad en los ataques, tres días después de que el Congreso de Estados Unidos aprobara esta línea de acción frente al veto impuesto por el presidente Barack Obama.

Obama había vetado inicialmente la posibilidad de que un particular estadounidense pudiera denunciar a un estado extranjero al considerar que esta vía legal podría dañar las relaciones bilaterales -y permitiría a ciudadanos extranjeros denunciaran a Estados Unidos por crímenes de guerrra-. El Congreso, en una decisión sin precedentes en todos los años de presidencia de Obama, anuló dicho veto.

Según los documentos entregados por los abogados de DeSimone ante un tribunal de Washington, Arabia Saudí proporcionó apoyo material a la red terrorista Al Qaeda durante más de una década y estaba al tanto de la trama de los atentados. «Sin ese apoyo, Al Qaeda no habría tenido la capacidad de concebir, planear y ejecutar los atentados del 11 de septiembre de 2001», según el texto, recogido por la cadena CNN.

La denuncia alega que las afectadas, DeSimone y su hija, han sufrido «daños personales graves y permanentes», y persigue una compensación económica no especificada.

El Gobierno saudí critico el pasado viernes la cancelación del veto de Obama, una decisión «de gran preocupación para la comunidad de naciones que se oponen a la erosión del principio de inmunidad soberana que ha gobernado durante cientos de años las relaciones internacionales y que tendrá un impacto negativo para todas las naciones, entre ellas Estados Unidos».