¿Cómo se hace?
Jardín

Cómo hacer jardinería con los niños

La jardinería es una activida enriquecedora para todos, en especial para los más pequeños. Veamos paso a paso Cómo hacer jardinería con los niños.

Aunque pensemos que a los niños solo les gusta sentarse delante de un videojuego o pasarse horas frente a la pantalla de un smartphone, lo cierto es que basta con proponer una experiencia que escape a la rutina para que estén dispuestos a participar, y una de las mejores y más divertidas es la de la jardinería o que nos ayuden con las plantas en la terraza. Veamos a continuación, una guía de pasos para saber cómo hacer jardinería con los niños.

A todos los niños les gusta pasar tiempo en contacto con la naturaleza y jugar a ser pequeños jardineros, de modo que ¿qué mejor idea para ellos que ver crecer una planta a partir de las semillas, y ver además como nace su fruto gracias al cultivo organizado en el jardín y en familia? Son experiencias enriquecedoras y muy divertidas que podemos comenzar a practicar con los niños a partir de los 3 años.

Pasos para hacer jardinería con los niños

  1. La jardinería con los más pequeños es útil para explicar el concepto de espera, paciencia y cuidado. En este sentido, podemos comenzar aconsejando a los más pequeños, que ya sean capaces de escribir, que mantengan un pequeño ‘cuaderno de cultivo’ para anotar los diferentes pasos, añadiendo además fotos, dibujos e información sobre las plantas: preparación del suelo, siembra, riego, siguiendo las fases de crecimiento.
  2. Los pequeños pueden además aprender a conocer los nombres de flores e insectos, y de los vegetales que comen en la mesa. Para comenzar, podemos ir a comprar con ellos las semillas de las plantas que vamos a tener en nuestro jardín o terraza.
  3. Una vez compradas, podemos preparar el suelo en el que plantar y que sean ellos los que planten las semillas. Sabrán cuáles han sido las plantas que han sembrado ellos y estarán emocionados ante el hecho de ver crecer la planta.
  4. Ahora que en breve estaremos en invierno, podemos aprovechar para llevar nuestro jardín al interior de casa, comprando macetas, colocando estas en cajas de madera (como las de vino por ejemplo) y dejando que los niños planten semillas de naranja, limones y mandarinas y fresas silvestres (que también se encuentran a la venta en el supermercado) que pueden crecer cerca de una ventana lejos de la luz solar directa.
  5. En primavera, entre marzo y abril, se pueden plantar lechuga, rábanos y guisantes al aire libre.
  6. Simplemente lo que tenemos que hacer es insertar una capa de arcilla expandida en la maceta, seguida de una capa de tierra, luego dejamos que los niños coloquen cuatro o cinco semillas y que cubran con una capa delgada de tierra que necesitarán mantener húmeda.
  7. Luego les pedimos a los niños que coloquen la caja con las macetas cerca de la ventana y que rieguen cada dos o tres días. Los brotes brotarán después de una semana, dos, tres, hasta un mes, dependiendo del tipo de semilla plantada. ¡Los niños jugarán y se divertirán usando las herramientas de los adultos!