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Salud

¿Cómo controlar los picos de glucosa? Una acción clave para mejorar la longevidad

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

La glucosa es un monosacárido esencial para el cuerpo humano, ya que constituye una fuente primaria de energía. Proviene de alimentos como el pan, las legumbres, las frutas, los vegetales y los lácteos. Una vez consumida, la glucosa se transporta a través del torrente sanguíneo y se almacena en el hígado, donde se convierte en energía utilizada para funciones biológicas vitales, como los latidos cardíacos, la respiración, el movimiento muscular, la renovación celular, la digestión y la regulación térmica del cuerpo. Mantener niveles equilibrados de glucosa es crucial, ya que su exceso puede ser perjudicial para la salud.

Y es que alteraciones en los niveles normales pueden desencadenar enfermedades graves como la diabetes y el síndrome metabólico. La relación entre la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares es estrecha y preocupante, ya que comparten varios factores de riesgo significativos. La diabetes tipo 2, caracterizada por la resistencia a la insulina y los picos de glucosa en la sangre después de las comidas, incrementa considerablemente la probabilidad de desarrollar enfermedades cardiovasculares. Estas condiciones adversas no sólo coexisten, sino que también se potencian mutuamente: la presencia de enfermedades cardiovasculares puede complicar el control glucémico en personas con diabetes.

El invento revolucionario para controlar los picos de glucosa

Los aumentos repentinos de azúcar en sangre después de consumir alimentos ricos en azúcares y carbohidratos refinados, conocidos como picos de glucosa, son motivo de preocupación creciente debido a su impacto negativo en la salud. Estos picos suelen ser seguidos por caídas abruptas en los niveles de azúcar en la sangre, perjudicando al bienestar general y contribuyendo al desarrollo de condiciones metabólicas como la obesidad, la diabetes tipo 2 y el síndrome metabólico.

En respuesta a esta problemática, Longevitas Labs, un laboratorio español especializado en la salud y el envejecimiento saludable, ha lanzado R-Glucose, un innovador producto diseñado para controlar de manera natural los picos de glucosa y ayudar en la gestión del peso. Este suplemento incorpora la tecnología patentada Reducose, que ayuda a reducir la absorción de glucosa en el intestino, mitigando así los riesgos asociados con los aumentos rápidos de azúcar en sangre después de las comidas.

Además de regular los niveles de glucosa, R-Glucose ofrece propiedades antioxidantes y antiinflamatorias gracias a ingredientes como la canela y la naringenina. Estos componentes no sólo protegen las células del daño oxidativo, sino que también apoyan la salud metabólica en general.

El Dr. Ángel Durántez, experto en medicina de la gestión de la edad y director técnico de Longevitas Labs, subraya que los picos de glucosa después de las comidas son especialmente perjudiciales para individuos con prediabetes o en buen estado de salud general, tal y como recoge La Razón. Estabilizar los niveles de glucosa mejora el control glucémico y también promueve la prevención de complicaciones a largo plazo y facilita la gestión del peso.

El control efectivo de la glucosa en sangre  es crucial para la salud metabólica, y también juega un papel vital en la regulación del apetito y el almacenamiento de energía corporal. Incorporar R-Glucose como parte de una estrategia integral que incluya una dieta equilibrada, ejercicio regular y descanso adecuado puede significativamente mejorar la calidad de vida y el bienestar general.

Consejos prácticos

Para mantener niveles óptimos de glucosa en sangre, es fundamental seguir ciertas recomendaciones prácticas.

Paola Procell, una experta en dietética, destaca que la prevención de los picos de glucosa mediante la alimentación desempeña un papel crucial en la reducción del riesgo de varias enfermedades crónicas. En particular, evitar estos picos ayuda significativamente a prevenir enfermedades cardiovasculares.

La resistencia a la insulina, común en la diabetes tipo 2, frecuentemente se asocia con dislipidemia, una condición que afecta los niveles de lípidos en la sangre, incluyendo altos triglicéridos y bajos niveles de HDL (lipoproteínas de alta densidad, conocidas como colesterol «bueno»), junto con niveles elevados de LDL (lipoproteínas de baja densidad, o colesterol «malo»), según recoge ABC.

En este contexto, incorporar alimentos ricos en fibra soluble, como avena, nueces, legumbres, naranjas y verduras de hoja verde, ayuda a regular la absorción de carbohidratos en el intestino. Además, optar por desayunos con alimentos integrales y proteicos, como tostadas, huevos, yogures o semillas, en lugar de alimentos refinados y azucarados, ayuda a prevenir aumentos rápidos de glucosa en la sangre.

Asimismo, mantenerse bien hidratado bebiendo suficiente agua diariamente es clave tanto para la salud renal como para evitar picos altos de glucosa. En lugar de contar calorías, centrarse en una alimentación equilibrada que incluya frutas, vegetales, proteínas, fibra y grasas saludables contribuye significativamente a estabilizar los niveles de glucosa.

Por último, la actividad física regular no sólo mejora la sensibilidad a la insulina, facilitando la absorción de glucosa por las células musculares, sino que también ayuda a mantener un peso saludable y reduce el riesgo de acumulación de grasas y glucosa en el sistema circulatorio.