¿Sabías que se lanzaron bombas de madera en la Segunda Guerra Mundial?

Todos conocemos la frase de que en una guerra todo vale y esto para bien o para mal es muy cierto. Esto incluye todo tipo de armas, estrategias y por supuesto, engaños. La segunda guerra mundial estuvo plagada de estos últimos, engaños realizados por ambos bandos para tenderle trampas al otro. Existieron muchos y de distintas clases, algunos como propagar rumores falsos sobre ataques que no iban a ocurrir para que el enemigo desplegase tropas en lugares alejados de los verdaderos objetivos, hacerse pasar por un soldado del otro bando para infiltrarse entre sus filas, e incluso construir bases falsas de madera para que el equipo opuesto las atacase, haciéndoles perder la atención, tiempo y recursos.

La operación “Fortitude” y la copia alemana de mala calidad.

La operación Fortitude fue un engaño hecho para despistar a los alemanes para que estuviesen distraídos y dejasen desprotegidos los verdaderos objetivos. Esta operación consistió en la creación de bases, ejércitos e incluso tanques falsos, todo hecho a base de madera y telas para hacer pensar al enemigo que existían muchas más fuerzas de las que realmente disponían y desplegadas en lugares concretos. Esta operación se llevó a cabo para restar tropas alemanas en el desembarco de Normandía y funcionó, se pensaron que el desembarco sería en Calais.

Con el tiempo los alemanes se dieron cuenta de este engaño y decidieron copiar la estrategia, por lo que comenzaron la construcción de multitud de aeródromos hechos de madera que incluso contenían aviones igual de falsos. Sin embargo, por lo que se sabe estas creaciones no fueron tan realistas como se esperaba por lo que los Aliados se dieron cuenta fácilmente y no cayeron en su propia trampa.

Una última ‘broma’

La cosa podría haber acabado ahí, con Alemania perdiendo tiempo y dinero no solo atacando a los hangares falsos de sus enemigos, sino que también construyendo los suyos propios que resultaron ser inútiles. Pero existen testimonios de testigos que afirman que los Aliados decidieron no parar ahí, les gastaron una última broma.

Resultaba obvio que esas bases alemanas eran falsas, así que pensaron en hacerles un ataque igual de falso. No se sabe con exactitud si solo ocurrió una vez, si fueron varias o si siquiera llegó a pasar, pero por lo que cuentan algunos testigos, los Aliados decidieron bombardear estas bases utilizando un avión cargado de bombas de madera, falsas todas ellas, a modo de burla por el intento fallido de engaño.

La razón por la que se duda de este acontecimiento es que ocurrió en una guerra en la que perfectamente podrían existir armas antiaéreas ocultadas cerca de los falsos aeródromos, por lo que realizar esta broma sería un peligro innecesario.

Tú que piensas, ¿crees que la broma fue real o que es solo una leyenda? Comparte este texto con tus contactos para que ellos también conozcan acerca de esta curiosa historia.