Gastronomía

El viaje a ‘La Séptima Maravilla Gastronómica’ de Extrem

Maravillas hay muchas, del mundo antiguo, del moderno, arquitectónicas, naturales, musicales, pictóricas, pero ninguna como las gastronómicas. Seamos francos; con nada se disfruta tanto como con aquello que se come. Y en este país, el mejor del mundo, sin duda alguna, de joyas culinarias estamos muy servidos; tortilla, croquetas, gazpacho, paella… Pero estarán ustedes de acuerdo con un servidor que el rey de todas las joyas gastronómicas es el jamón. Sí, como lo ven, en mayúsculas. El jamón ibérico es el máximo exponente de la marca España, el mejor embajador y el absoluto representante a nivel internacional de nuestro país, y además el más querido —en Japón es una locura el consumo de jamón ibérico de bellota; a mí me da vueltas la cabeza—. Un servidor se ve en la posición de afirmar que nadie es capaz de renunciar a un buen jamón, esa lonchita alegra el día a cualquiera y a cualquier hora; no hay un momento de consumo concreto ni un perfil de consumidor. Por lo general, todos amamos el jamón. Así que, si nuestro viaje tiene como fin catar el mejor jamón de Extremadura y me aventuro a decir de España, pues se va sin remilgos.

Extrem Puro Extremadura, marca dedicada a la elaboración del producto ibérico más sublime, ha presentado su nueva colección de Navidad —para la que ha colaborado con la soberbia ilustradora Mercedes Bellido para sorprender una vez más con su packaging—, que rinde culto a los siete sabores que encierra esta joya de la gastronomía patria. Un grupo reducido de personas pudimos disfrutar de la excelencia de los productos de esta compañía extremeña en la bodega Dehesa Luna, que forma parte de Agriculturas Diversas, grupo empresarial al que pertenece también Extrem. En Albacete, concretamente en el archiconocido pueblo de La Roda—sí, imposible no pensar en sus Miguelitos— se ubica esta bodega donde fue todo un privilegio conocer sus vinos y, por supuesto, disfrutar de los ibéricos de Extrem Puro Extremdura. Una jornada rica, agradable y amena.

Si el ibérico de bellota ha llegado a ser uno de los productos más codiciados en el planeta y uno de los favoritos de la restauración, es por la complejidad y riqueza de su sabor en boca. Es evidente que la sal tiene un papel muy importante en la curación del jamón, pero no menos que las bellotas en la alimentación de los ibéricos en la montanera o que el paso del tiempo en bodega de los jamones, paletas y embutidos. Matices dulces y amargos, la sensación en boca del oleogustus, la delicadeza del umami, un toque salado en el paladar… La nueva colección de Navidad de Extrem Puro Extremadura por Mercedes Bellido es una clase magistral de la influencia y presencia de los diferentes sabores en los ibéricos de bellota de la marca extremeña.

Aunque algunos se quedaron en los cuatro sabores básicos —dulce, salado, amargo y ácido—, en la década de los 2000 llegó el quinto sabor, el umami, gracias a la proliferación de alta cocina nipona en nuestro país. Y en 2015, un equipo de investigadores de la Universidad de Purdue desveló la existencia de un sexto sabor, el oleogustus, que describe la sensación que despiertan en boca los ácidos grasos. Ahora, la firma extremeña Extrem, sinónimo de excelencia y calidad en el mundo del ibérico, desafía al mercado con un rompedor packaging para sus jamones, paletas y embutidos que pone forma y color a los ya conocidos y alude a la existencia de un séptimo sabor que integra, armoniza y marida a la perfección los otros seis.

Sólo una artista como Mercedes Bellido, la cotizada artista que ha roto esquemas y enamorado al mundo de la moda –ha trabajado con firmas de la talla de Gucci, Dior, Chanel y Carolina Herrera– es capaz de convertir en trazo las sensaciones que provoca la degustación de una de las maravillas de la gastronomía mundial: el ibérico de bellota. Tras un exhaustivo trabajo de investigación y haciendo gala de su particular estilo, la ilustradora zaragozana ha sabido, en su cuarta colaboración con Extrem, capturar la esencia de los distintos sabores y plasmarla en los estuches de jamón, paleta y embutidos ibéricos de bellota que la marca extremeña lanza de cara a Navidad. De locos.

Toca empezar a estrujarse la cabeza y pensar en ese regalo con el que sorprender al cuñado snob o al suegro de paladar fino. Y para facilitarnos la vida, Extrem Puro Extremadura nos brinda cuatro opciones con las que deleitar a nuestros seres queridos más foodies estas Navidades. La Séptima Maravilla Gastronómica, el estuche que da título a la colección, contiene una pieza de jamón de bellota 100 % ibérico D.O. P. Dehesa de Extremadura. Lujo Umami alude a la paleta de bellota 100 % ibérica D.O.P. Dehesa de Extremadura. El cofre Cuarteto Gourmet representa los cuatro sabores esenciales del gusto: salado, dulce, ácido y amargo; incluye lomo, chorizo y salchichón. La Colección Selecta de Oleogustus permite descubrir ese sabor graso, el oleogustus, uno de los más especiales de la gastronomía ibérica; en el estuche hay seis sobres de loncheados (jamón, paleta, lomo, presa, chorizo y salchichón), más un sobre adicional de paleta de bellota 100% ibérica como regalo. Además, cada estuche lleva incluido una tabla personalizada de bambú. Simplemente exquisito.

Un concepto que sólo podía convertir en realidad Extrem Puro Extremadura, sinónimo de tradición, innovación, sostenibilidad, compromiso y excelencia. Nacida en 2013 y con sede en Herreruela (Cáceres), Extrem representa la excelencia en la elaboración del cerdo ibérico, con un sello indiscutible de trabajo artesano, minucioso, comprometido con el entorno y de respeto absoluto por el cerdo ibérico.