Gastronomía
Restaurantes

Uno de los mejores bares tradicionales de Barcelona lleva casi 80 años abierto y la media por plato es de 5€

  • Manuel Morera
  • Periodista y fundador del pódcast V9, el programa de F1 más escuchado de España. Universidad de Valencia y Radio 3. Anteriormente en ElDesmarque, Levante TV y Las Provincias.

Los famosos tienen sus restaurantes preferidos para disfrutar en Barcelona, pero si a ti lo que te gustan son los bares de toda la vida hay un local, que lleva casi 80 años abierto y es mejor opción.

Por supuesto, hablamos de Gelida, un bar de los que ya casi no quedan en la ciudad Condal. Se han especializado en tapas y platos de cuchara, pero lo mejor de todo es que los precios son populares.

No hay nada más caro de 17 euros, el plato medio cuesta cinco euros y el ambiente es increíble. Además, no tienes que irte a la otra punta de Barcelona: está en pleno Ensanche.

El bar de toda la vida en Barcelona con una tradición familiar inigualable

Gelida ha conquistado durante 79 años a sus comensales gracias a su cocina y buena ubicación. Desde 1946 está en la calle Diputación, 133, en pleno Ensanche de Barcelona.

Pero la historia del Gelida es también la de una familia trabajadora. El abuelo Joan arrancó con un despacho de vinos a granel. Luego su mujer, Ramona, se lanzó a los fogones. Su hijo Albert consolidó el negocio y ahora es Gerard, ingeniero de formación, quien lo dirige desde hace más de diez años.

Ahora sirven a más de 600 comensales al día, por lo que han necesitado ayuda. A los mandos de la cocina está Teófilo Jr. Saysay, conocido como Júnior, el sobrino de Bernardo (Bo de Bernat).

Y no importa que haya otros bares que quieran imitarlos, ya que es imposible. No tienen un recetario en la cocina, sino que todos los secretos se han transmitido de forma oral durante generaciones.

Gracias a ello, han desarrollado una filosofía clara: respeto a las raíces, pero sin quedarse anclados en el pasado. Quizás por ello calculan que ocho de cada diez clientes son asiduos.

‘Gelida’: un rincón donde todavía resisten los bares de toda la vida en Cataluña

Gelida abre todos los días menos los domingos y tiene el aspecto de cualquier bar de toda la vida. Justo en esa tradición reside la magia. Por ejemplo, no esperes encontrar una carta impresa.

En este local barcelonés la carta se escribe todos los días en la pizarra, pero siempre anunciando unos manjares increíbles. Hay callos, fricandó, lentejas, bacalao a la llauna, conejo al horno, tortilla de patatas, caracoles o carrilleras de cerdo.

Es decir, se han especializado en cocina humilde, de esas que ya no se encuentran fácilmente, preparada con mimo y con una relación calidad-precio imbatible.

Además, el vino se sirve del tonel, como se hacía antes en los buenos bares. Sin embargo, eso no significa que sean malos: hay del Priorat, Gandesa, Penedès, moscatel, etc.

De entre todos los bares en Barcelona lo tienen claro: este es el mejor

Hay bares en toda España, que se han hecho famosos por sus tapas, pero ninguno en Barcelona ha conseguido poner tan de acuerdo a tanta gente como Gelida.

«Es la segunda vez que voy a este bar y aseguro que volveré. Merece la pena la espera, aunque siempre está a tope y no me extraña», comentaba un cliente. Y es que una curiosidad es que no acepta reservas.

Porque su gran secreto es la apuesta por la cocina casera: «La comida del Gelida te recuerda momentos de tu infancia. Sabores de la comida que te hacía la abuela con los platos típicos de siempre».