España
Juicio a Otegi

TVE da alas a Garzón en su defensa de Otegi: «Un nuevo procedimiento de juicio oral es ya una condena»

Baltasar Garzón, ex juez de la Audiencia Nacional expulsado de la carrera judicial por un delito de prevaricación, ha defendido a Arnaldo Otegi, líder de la formación proetarra de EH Bildu, después de que el Tribunal Supremo haya ordenado repetir el juicio contra Otegi por el que fue condenado en 2012, conocido como caso Bateragune. Lo ha hecho en una entrevista concedida a TVE este martes. «El hecho de sufrir un nuevo procedimiento de juicio oral es ya una condena», ha asegurado Garzón.

«El juicio se produjo, se anula ahora por la falta de imparcialidad o la apariencia de falta de imparcialidad. Y a partir de ahí, bueno, yo creo que estaba previsto la revisión, se anula el juicio, se resuelve sobre la posible indemnización y ya está, se ha cumplido la condena. El problema, vuelvo a decir, es que el hecho de sufrir un nuevo procedimiento de juicio oral es ya una condena», ha defendido el ex magistrado en La Hora de La 1.

El actual dirigente de EH Bildu fue condenado por el caso Bateragune, que le impuso una pena de diez años. Pero esta sentencia se quedó en seis años y medio de cárcel después de un recurso presentado ante el Tribunal Supremo, además de seis años de inhabilitación para cualquier cargo público por intentar reconstruir la ilegalizada Batasuna. Baltasar Garzón fue el que envió a Otegi en 2009 a prisión incondicional por un delito de integración en organización terrorista como máximo responsable de Bateragune. Lo hizo porque en su día fue el juez instructor de este caso.

Este lunes, el Tribunal Supremo apoyó la solicitud de la Fiscalía General del Estado y de Vox para ordenar repetir el juicio contra el líder de Bildu y otras cinco personas. Otegi fue condenado, pero el Tribunal Europeo de Derechos Humanos tumbó la sentencia que le condenaba por falta de imparcialidad de uno de los tres magistrados que le juzgó, y condenó, en la Audiencia Nacional.

Ahora el ex magistrado defiende al dirigente proetarra ante la repetición del juicio. «Yo no lo tengo claro, porque se produce un hecho de que reivindicando un derecho reconocido en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, obteniendo una revisión del caso anulando la sentencia, ahora se ve sometido a un segundo juicio que por supuesto tendrán que verse los límites, y en todo caso no puede haber un empeoramiento de la sentencia. Y todo lo demás tendría que ser o la misma o una absolución. Pero la carga del proceso yo creo que no es de recibo y tendría que haberse planteado otra solución que en sí mismo la revisión ya conlleva. Se anula la sentencia, se ha cumplido la pena y en su caso se plantea una indemnización y ya está. Es un problema bastante complejo. Y la carga del nuevo juicio es ya en sí una nueva condena», ha sostenido.

«Lo que hizo por la paz estuvo bien»

Baltasar Garzón también ha reivindicado a Arnaldo Otegi como un «hombre de paz», afirmaciones también sostenidas por líderes políticos como Pablo Iglesias, vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Podemos. «Las condenas se producen en el momento que acontecen, es decir, se juzgan hechos anteriores, no las actitudes o las actuaciones posteriores. Al señor Otegi se le siguió un procedimiento por hechos anteriores al 16 de octubre de 2009, que es cuando se produjo la detención. Por tanto, lo que hiciera después no se tuvo en cuenta. Lo que hizo por la paz o porque ETA abandonara pues me parece muy bien, de hecho, se le tiene que reconocer», ha señalado.

No obstante, el ex juez también reconoce que el líder de Bildu «ha tenido actitudes que no casan muy bien con esa cooperación o colaboración definitiva al reconocimiento de la violencia y de las víctimas. Pero eso es otra dinámica, lo que no tiene sentido ahora es plantear en planos asimétricos, una cosa son las investigaciones y los hechos imputables antes de 2009 y luego lo que ha hecho posteriormente».

Baltasar Garzón fue juez en la Audiencia Nacional hasta que fue inhabilitado por prevaricación por el Tribunal Supremo en 2012 tras ordenar que se interviniesen las conversaciones que los cabecillas de la trama Gürtel mantuvieron con sus abogados mientras se encontraban en prisión.

Defiende a Delgado

En la actualidad mantiene una relación de pareja con Dolores Delgado, actual fiscal general del Estado. Garzón ha aprovechado su entrevista en la televisión pública para defender a Delgado de los «ataques impresentables» de los que ha sido objetivo la fiscal general del estado por su vinculación con el comisario encarcelado José Manuel Villarejo.

A su juicio, tanto él como la propia Delgado están siendo «víctimas de una situación» en la que se ha puesto «en tela de juicio algunas acciones que deberían estar por encima del análisis que se están haciendo de ellas».»Me estoy refiriendo a los ataques que se han hecho a la Fiscal General del Estado», ha apostillado Garzón.