España

Torrent multó con 900 euros a un joven por colocar la bandera española en su ayuntamiento

El recién investido presidente del Parlament, Roger Torrent, multó con 900 euros a un joven que puso la bandera de España en el ayuntamiento de Sarriá de Ter del que el hoy president era alcalde.

La imagen conciliadora de Torrent que intentó ofrecer en su discurso de investidura, poco tiene que ver con las actuaciones que ha llevado a cabo hasta hoy. La sanción fue impuesta simplemente por colocar la enseña nacional que, además, debía estar ondeando por ley.

La penalización económica no es lo único que sitúa al presidente como independentista radical. También fue uno de los presentes en los escraches a la Guardia Civil y fue testigo de los ataques a los coches de la autoridad.

En un informe remitido al Tribunal Supremo, la Guardia Civil menciona a más de 30 políticos independentistas de ERC, el PDeCAT y la CUP que acosaron a la comisión judicial ordenada por el titular del Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona, Juan Antonio Ramírez Sunyer, durante la investigación sobre la organización del referéndum ilegal del 1-O.

Tampoco sus primeros pasos parecen ser muy acertados. Torrent  empleará dinero público en visitar a un prófugo, Carles Puigdemont, para tantear las opciones para que sea investido, pese a ser conocedor –el Gobierno se lo ha vuelto a recordar hace unas horas- de que se trata de una opción imposible por ilegal.

Puigdemont se preocupó este miércoles de felicitar a Torrent por su nuevo cargo, hasta el punto de hacerlo cuando ni siquiera había abandonado el hemiciclo, a través del móvil de Jordi Turull. Horas más tarde, el huido ha solicitado a la cámara autonómica poder delegar su voto en la sesión o sesiones en las que se elija al presidente de la Generalitat.