España
Crisis del coronavirus

Sanidad admite que la variante delta ya supone el 85% de contagios tras ocultarlo durante semanas

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El último informe sobre la evolución de las mutaciones del coronavirus reconoce la brutal expansión de la variante delta, que supone ya el 85% de los contagios. 

Sanidad, como publicó OKDIARIO, ocultó durante semanas el impacto de esta variante, relacionada con una mayor capacidad de contagio. De hecho, tras su introducción en España, la incidencia se ha disparado. El director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, aseguraba en junio que esta variante no tenía un «espacio importante», minusvalorando así su potencial de propagación. Ahora, Sanidad ya reconoce, una vez más, lo erróneo de sus pronósticos.

En el informe Actualización de la situación epidemiológica de las variantes de SARS-CoV-2 de preocupación (VOC) e interés (VOI) en salud pública en España, el Ministerio de Carolina Darias señala sobre la variante delta: «En España, ha ido incrementando su porcentaje en los muestreos aleatorios: en la semana 31 (2 al 8 de agosto), con datos de 12 CCAA, el porcentaje de casos compatibles estimado por PCR se encuentra entre 49,9% y 100%. Mediante secuenciación integrada en el sistema de vigilancia, en la semana 30 con datos de 15 CCAA y 2 ciudades autónomas, el porcentaje alcanzó un 85,2%».

Durante semanas, Sanidad ocultó el avance de la variante. Así, por ejemplo, cuando representaba ya uno de cada cuatro contagios -según los resultados de los laboratorios a través de la base de datos GISAID- los estudios del Ministerio reconocían tan sólo un 2,7%.

Esta situación fue a más. Sanidad reconocía por ejemplo que la cepa estaba presente en el 43% de los contagios totales cuando los laboratorios habían comunicado internacionalmente que era la responsable del 71,4% del total por Covid en España. 

La amenaza de la variante se ha visto confirmada en el tiempo. De hecho, EEUU la llegó a calificar como el virus más contagioso que se conoce, por encima del ébola o la gripe común.

El Gobierno, pese a ello, ha tomado incluso decisiones desoyendo el potencial transmisor de la mutación.

Seguridad Nacional, como informó este periódico, avisó de la propagación de esta variante antes de que Pedro Sánchez aprobase el fin de las mascarillas. Una medida con la que trató de maquillar entre la opinión pública la concesión de los indultos a los presos del procés. Sólo tres días antes de que esta medida de protección dejase de ser obligatoria en exteriores, el informe del departamento adscrito a la Presidencia del Gobierno recogía los avisos de la jefa de la célula técnica anti-Covid de la Organización Mundial de la Salud (OMS), María Van Kerkhove, acerca de la mayor propagación de esta variante india.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) advertía: la variante delta es la que «se transmite con mayor velocidad» y puede «aprovechar la relajación de las restricciones». Así lo exponía el informe diario de Seguridad Nacional sobre la situación del Covid.

El Gobierno lo negó

Durante meses, en cambio, desde el Gobierno se quitó importancia a esta mutación. El 26 de abril, y pese a las dramáticas imágenes que llegaban desde la India, Fernando Simón descartaba la presencia de la cepa en España y afirmaba, además: «La información no indica que tengamos que preocuparnos por ella». Según el jefe de las alertas del Gobierno, la variante no resultaba «de preocupación» sino sólo «de interés», y también mantenía que no se había asociado a una mayor transmisibilidad o un mayor riesgo.

Más tarde, a mediados de junio, y mientras Reino Unido se planteaba un freno a la desescalada por el incremento incesante de contagios, el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias seguía sin ver motivos para la alarma. Según Simón, la variante no tenía «un espacio importante» en España y sería «marginal». Simón aseveraba que “de ninguna manera” se producirá en el futuro una oleada de coronavirus de la “envergadura” de las anteriores.

Por entonces, desde la Comunidad de Madrid se advertía de que la situación era ya de «transmisión comunitaria», un hecho que motivó que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso decidiese adelantar la administración de la segunda dosis de la vacuna de AstraZeneca a los mayores de 60 años.