España
Polémica

Sánchez regaló 20 millones a Marruecos 12 días después de negar la españolidad de Ceuta y Melilla

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El Gobierno español se comprometió con Marruecos a concederle un préstamo de 20 millones de euros, a través de la sociedad financiera marroquí Jaida S.A., apenas 12 días después de que Rabat negase ante la ONU la españolidad de Ceuta y Melilla. Este crédito, que el Ejecutivo celebró en un encuentro con el ministro de Exteriores marroquí, Naser Burita, el pasado 21 de septiembre en Nueva York, fue aprobado este mismo martes en la reunión del Consejo de Ministros. Días antes, el 9 de ese mismo mes, Rabat remitió una carta a la ONU en la que negaba la españolidad de Ceuta y Melilla y hablaba incluso de ésta última como un «presidio ocupado».

Esa comunicación fue la respuesta a una petición previa de la organización internacional para que Marruecos aportase información sobre las muertes de inmigrantes en el asalto a la valla del pasado mes de junio. Los vídeos que circularon entonces revelaron cómo las autoridades marroquíes golpeaban a los inmigrantes, que yacían inconscientes en el suelo.

En dicha carta, el régimen alauí dice que es «inexacto» referirse a «la línea de separación entre Marruecos y Melilla» como «frontera hispano-marroquí», puesto que «el reino de Marruecos no cuenta con fronteras terrestres con España y Melilla sigue siendo un presidio ocupado y, por este motivo, no se puede hablar de fronteras, sino de simples puntos de paso». Tras conocerse esa misiva, un alto cargo del Ministerio de Exteriores marroquí ha afirmado a la agencia Efe que la declaración conjunta firmada entre Marruecos y España el pasado 7 de abril sí reconoce que entre los dos países existen «fronteras terrestres».

Críticas

La misiva ha provocado las críticas de la oposición, que ha instado a Sánchez a proteger la españolidad de las dos ciudades autónomas.

En su intervención en el Pleno del Congreso, la portavoz parlamentaria del PP, Cuca Gamarra, ha reclamado al socialista que defienda «la soberanía nacional y la integridad territorial de España», a lo que Sánchez ha zanjado que «Ceuta y Melilla son España». Vox, por su parte, le ha recordado que Marruecos «no es un país del que se pueda fiar» y ha exigido un cambio de rumbo con respecto a considerar «socio y amigo» al país vecino.

Préstamo

El crédito de 20 millones concedido a Jaida S.A., una sociedad financiera marroquí que opera desde Rabat y centrada en el apoyo a la inclusión financiera en Marruecos, tiene un plazo de amortización de cuatro años.

El Gobierno justifica que «la cooperación española en el reino de Marruecos está apoyando de manera especial a la sociedad civil, los procesos de reforma democrática y el fortalecimiento del tejido económico, priorizando de modo transversal el género». En este contexto, sostiene, esta operación «contribuye al logro de las metas priorizadas, como la reducción de la pobreza, la igualdad de género y el trabajo decente y el crecimiento económico». Se trata del primer crédito de estas características que se otorga al país en 20 años.

Este nuevo desafío de Rabat se produce en un momento aparentemente apacible en las «nuevas relaciones» entre Pedro Sánchez y Mohamed VI, después de que el presidente español reconociese el plan marroquí sobre el Sáhara como «la base más sólida, realista y creíble» para resolver el conflicto. Esa afirmación supuso un giro histórico a la política exterior española, que siempre ha mantenido que la salida debe ser acordada por ambas partes en el marco de las resoluciones de la ONU.

El pasado 7 de abril, el líder socialista pactó con Mohamed VI una hoja de ruta que no contenía un reconocimiento expreso a la integridad territorial de las ciudades autónomas o del archipiélago canario. Un hecho que Sánchez tuvo que matizar después asegurando que «la soberanía nacional de España está fuera de toda duda».