Rivera se compromete a «cumplir» con el sí al PP pero sin Rajoy
Albert Rivera quiere que Ciudadanos, PP y PSOE se pongan a trabajar desde ya para lograr una mayoría que dé lugar a un gobierno estable y reformista. Reformista en primer término con una ley electoral que ha lastrado sobremanera las opciones de los naranjas: «Con 8 décimas menos hemos perdido 8 escaños», ha lamentado su presidente en ‘El programa de Ana Rosa’.
A su juicio, la «polarización brutal» de la campaña les ha perjudicado, al igual que la elevada abstención. «Es evidente que queríamos más», ha admitido, pero también dice estar satisfecho con el número de votos, que no se ha traducido con proporcionalidad en asientos en el Congreso de los Diputados.
«Esta ley electoral sabíamos que era criminal para nosotros», ha continuado, tras lo que ha apuntado que los nacionalistas, a los que sí beneficia, no pueden condicionar al ejecutivo, en alusión al PNV, apoyo necesario del PP si el PSOE no quiere sumarse «ni por acción ni por omisión» a un pacto.
Lo último en España
-
Juanma Moreno estalla contra Sánchez por usar el Congreso para hacerle oposición: «Que venga aquí…»
-
Los científicos alertan: estos pueblos de Madrid se quedarán totalmente a oscuras muy pronto
-
Juicio al Fiscal General del Estado, en directo: última hora de García Ortiz hoy y los informes finales en el Supremo
-
El vídeo ante el juez de la empleada del PSOE que repartía los sobres: «Guardaba el dinero en un cajón»
-
Ayuso llama «caniches del Gobierno» a los diputados del PSOE: «Insultan como en las dictaduras»
Últimas noticias
-
Parece China, pero es España: la muralla más larga de Europa está en un pueblo de Extremadura
-
Adiós a la campana de cocina de siempre: su sustituto ya está en España y es este invento silencioso que lo cambia todo
-
El Banco de España alerta al Gobierno: necesita presupuestos ya para controlar la deuda y el gasto
-
Científicos de la Universidad de Michigan descubren una bacteria que convierte la materia en oro
-
Esto es lo que hacemos en el supermercado que pone de los nervios a los empleados