España

Rajoy pide «gobernabilidad» y advierte: «No derribaré lo construido»

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El presidente en funciones, Mariano Rajoy, ha convertido su intervención en el pleno de investidura, este sábado, en una insistente llamada al resto de grupos para asegurar la gobernabilidad del futuro Ejecutivo.

«España necesita algo más que una simple investidura. Necesita  un Gobierno que esté en condiciones de gobernar», ha empezado avisando.

El líder del PP ha evitado las menciones expresas al PSOE. Así, ha agradecido a Ciudadanos y Coalición Canaria «que han empezado a poner fin a este periodo de incertidumbre», para después, reprochar, en un mensaje velado, que los socialistas se cierren a futuros acuerdos con su Gobierno.

«Es contradictorio decir, como escuchábamos el jueves: «No nos gusta este gobierno, pero España nos necesita» ¿Y mañana? ¿A partir de mañana ya no interesa España?», se ha preguntado contrariado.

El candidato del PP ha asumido que no pide «un cheque en blanco»-«Me limito a reclamar un gobierno», ha considerado- pero ha avisado también de que «el voto de investidura no es un descargo de responsabilidad» sino «un compromiso de futuro y un compromiso para todos».

En este sentido, Rajoy se ha comprometido «a mejorar en todo lo que sea mejorable y a ceder en todo lo que sea razonable», pero, eso sí, «dentro de los límites que la realidad impone» y que, ha dicho, «no tienen nada que ver ni con el color del gobierno ni con su fortaleza o debilidad». Estos son, para Rajoy,  la unidad de España, los compromisos con la Unión Europea y la estabilidad presupuestaria.

«No estoy dispuesto a derribar lo construido, se puede mejorar, pero no puedo aceptar su demolición», ha advertido Rajoy.

En una advertencia clara a los socialistas, el líder del PP ha vuelto a insistir, como ya hiciera el pasado jueves, de que no derogará sus grandes leyes, como la LOMCE o la reforma laboral. La resolución en la que el PSOE validó su abstención recoge esa exigencia. «No tiene ningún sentido liquidar todas las reformas. Mejoremos lo mejorable, pero no impidamos que España siga siendo el país que más crece en Europa y el que más empleo crea. ¿Acaso es malo o es que está mal porque lo haya logrado un gobierno del PP?».

Rajoy ha avisado de que «se vota una investidura a un candidato que acude con un proyecto». «No pido la luna, pido un gobierno previsible, lo que significa que sus grandes líneas sean conocidas desde el principio, que anuncie de antemano lo que va a ocurrir y lo que no va a ocurrir, para que todo el mundo sepa a qué atenerse», ha dicho.

No obstante, Rajoy ha mostrado su mano tendida a lograr acuerdos,  avanzando «dos errores» en los que no incurrirá: «olvidar las limitaciones que la realidad nos impone y desperdiciar las oportunidades que la coyuntura nos ofrece».