España

Los perseguidos por la Justicia Evo Morales y Rafael Correa muestran su respaldo a Iglesias

A veces el viejo dicho popular que comienza «Dios los cría…» no puede ser más certero. Resulta que los respectivos ex presidentes de Bolivia y Ecuador, Evo Morales y Rafael Correa, ambos perseguidos por la Justicia en sus países, han mostrado su apoyo y solidaridad con el vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Podemos, Pablo Iglesias, por los «ataques» recibidos tras la petición del juez Manuel García Castellón ante el Tribunal Supremo para que se le investigue en el marco del caso Dina-Iglesias.

Evo Morales, que se encuentra ‘exiliado’ en Argentina, tiene varias órdenes de la Fiscalía de Bolivia para que comparezca en distintos procesos tras acusaciones de genocidio, terrorismo, sedición y estupro, entre otras. De hecho la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, ha advertido de que si el ex presidente bolivano vuelve al país en caso de ser habilitado como candidato a senador, tendrá que enfrentarse a la Justicia.

Bien, pues Morales ha expresado en Twitter su «solidaridad y apoyo» a Iglesias, al entender que es «víctima de ataques constantes» por parte de quienes «no respetan los principios democráticos y se benefician de la inestabilidad y de la violencia».

Sesión de control en el Congreso

Por lo que respecta al futuro procesal de Pablo Iglesias, el juez de la Audiencia Nacional ha elevado una exposición razonada al Tribunal Supremo para solicitar que investigue le impute debido a su condición de aforado, por los delitos de daños informáticos, revelación de secretos y denuncia falsa por su presunta implicación en  el caso Dina-Iglesias’.

La semana pasada, el vicepresidente aseguró que no concibe «ni como mera hipótesis» el que pueda ser imputado. «Es absolutamente imposible, no va a ocurrir», zanjó ayer.

La situación judicial del vicepresidente segundo marcará gran parte de la sesión de control de este miércoles en el Congreso, un Pleno al que inicialmente el líder de Podemos no iba a acudir, pero en el que finalmente sí estará presente e incluso responderá a sendas preguntas del PP y Vox.