Merkel y Sarkozy no aceptarán una Cataluña independiente dentro de la UE

El Congreso del Partido Popular Europeo (PPE) comenzó fuerte avisando al president de la Generalitat en funciones, Artur Mas y a los partidos soberanistas que si Cataluña se independiza de España no tendría cabida en la UE.

La familia del partido popular europeo apoya a Rajoy y explican a Mas que si Cataluña se independiza tendría que pasar por un «largo proceso» para ver si el resto de estados miembro de la UE aceptarían su adhesión. «Creo que no estarían muy por la labor», ha incidido el secretario general del PPE, Antonio López-Istúriz. 

El Congreso que tiene lugar en Madrid este miércoles y jueves acoge a los pesos pesados de Europa como la canciller Angela Merkel, el francés Nicolás Sarkozy o el portugués Pedro Passos Coelho que arroparán a Rajoy con sus reformas de cara a las generales.

En este contexto, el tema que más se ha hablado en los corrillos de bienvenida ha sido la resolución sobre la integridad territorial de los Estados y la defensa de la unidad nacional promovida por el PP español, la CDU que dirige Angela Merkel y los Republicanos de Nicolas Sarkozy. Se someterá a votación de los 78 partidos que forman parte del PPE y reflejará una unión de los conservadores europeos frente al independentismo.

El secretario general del PPE admitió que no puede adelantar si la resolución será aprobada por unanimidad, en referencia al sentido del voto de Unió Democrática de Catalunya (UDC), el otro partido español dentro de la familia democristiana europea.

En rueda de prensa, el presidente del PPE, Joseph Daul y el secretario general, López-Istúriz han recordado algunos puntos como que «nadie está por encima de la ley y todos son iguales ante los ojos de la ley» y recuerdan que si un territorio declara «unilateralmente» la independencia, sus ciudadanos perderán su estatus de ciudadanos en la UE.

«En el PPE se han seguido con gran preocupación las recientes cuestiones judiciales del presidente Artur Mas. Vamos a ver cómo se desarrolla ese asunto, pero repito que el tema se sigue con preocupación», ha insistido Istúriz.

El eurodiputado ha lanzado un órdago a los soberanistas diciendo que, en el caso de que se produjese esa separación, Cataluña tendría que seguir un proceso de adhesión a la UE. Es un proceso largo que, en el caso de alguna región con cierto poder económico e industrial-en clara alusión a Barcelona- sería desastroso para el tejido productivo y el empleo. Veríamos cómo se desarrollaban esos años de espera hasta que se pudiese tramitar esa adhesión que depende del voto unánime del Consejo Europeo, es decir de todos los estados miembros», ha avisado.

«Siempre he dicho que no sé cuál sería la actitud de España en el caso hipotético de votar su adhesión a la UE, pero estoy seguro que muchos estados miembro no verían con buenos ojos ese tipo de proceso o de adaptación», ha zanjado Istúriz.

En el borrador de esa resolución se recuerda que la UE es un proyecto político, social y económico que «siempre ha buscado la unión, no la división». Además, destaca que el mundo del siglo XXI exige fortalecer la Unión y no debilitarla. Tanto Daul como Istúriz recalcaron que el lema de este congreso: «Together, juntos» aunque sea a nivel global, también se aplica a España.

El eurodiputado ha querido avisar de los populismos en Europa para dar un claro mensaje sobre Podemos: la confianza que se ha recuperado con inversores, empleo y tejido industrial en España puede perderse si gana el 20 de diciembre Pablo Iglesias.

«Los populismos han aprovechado las crisis que se han sucedido en los diferentes países, el sufrimiento de los ciudadanos para dar un mensaje equivocado», ha señalado Istúriz para poner de ejemplo los casos de Grecia y Portugal.

«En Portugal han ganado los nuestros (Passos Coelho y Paulo Portas) han ganado las elecciones contra todo pronóstico y parece ser que en algunos despachos ahora mismo se está decidiendo el futuro de Portugal entre el partido socialista y los partidos comunistas antieuropeos. Sinceramente, si eso ocurre así, creo que sería una mala señal y que vayan tomando nota algunos, sobre todo en España», ha criticado.

«La tentación de tener ese tipo de coaliciones (de izquierda) lanzaría una mala señal y pueden imaginarse muchos cómo reaccionarían los inversores que ahora han vuelto a confiar después de unos años que no venían por aquí. Significa empleo, lo digo por si alguien no ha visto todavía la conexión- señala riéndose. Este tipo de coaliciones pueden poner en peligro todo hecho hasta la fecha», ha explicado.

En el caso de Grecia y con el triunfo de Syriza (el partido de Alexis Tsipras), el popular asegura que el partido de su compañero, Antoni Samaras puede volver a ser fuerza que gobierne. «Tsipras ha fracasado al aceptar un tercer rescate más duro que el que tenía Samaras», ha apuntado.