Marlaska reconoce ahora que habló con Ábalos de comprar mascarillas: «Coincidíamos a diario en Moncloa»

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha reconocido este jueves en la Comisión del Senado que investiga la llamada trama Koldo que sí llegó a hablar con el ex ministro de Transportes, José Luis Ábalos, de la «necesidad de adquirir mascarillas» en los días en los que Víctor de Aldama estaba colocando sus primeros pelotazos con material sanitario a distintas entidades públicas. Entre ellas, el Ministerio del Interior, al que endosó un contrato de 3,7 millones de euros por mascarillas pagadas un 30% más caras que otras administraciones. Marlaska ha justificado esas conversaciones alegando que se veían  «a diario en Moncloa».

El titular de Interior ha argumentado que, como ministro que formaba parte del comité de crisis organizado por el Gobierno, acudía todos los días a Moncloa y se veía con Ábalos en las fechas en las que la trama Koldo maniobró a través de Transportes para colocar hasta 54 millones de euros en mascarillas.

Así lo ha razonado ante una pregunta del senador de Vox Ángel Pelayo Gordillo, que le ha preguntado por su relación en esos días con el ex ministro Ábalos. «Muy… de ministro», ha respondido Marlaska. «¿Hablaban de la compra de mascarillas?», le ha repreguntado. «No… ya le digo que seguro que como nos veíamos todos los días en Moncloa porque había reunión permanente, en algún momento tuvimos que hablar de la necesidad de adquirir mascarillas», ha indicado Marlaska.

Sin embargo, el ministro del Interior ha precisado su respuesta finalmente para negar que en esas conversaciones se hablase de una «operación concreta de adquisición».

A Marlaska se le ha preguntado también si, como han apuntado algunos altos funcionarios de Interior, la orden de adjudicar el contrato de 3,7 millones en mascarillas a Soluciones de Gestión vino «de arriba», pero el ministro se ha desvinculado de ese señalamiento.

Nunca «sospechó»

En su intervención, ha insistido en que no existe ningún vínculo entre miembros de su Ministerio y dicha trama. Grande-Marlaska defendió que, en lo que respecta a José Luis Ábalos, ex ministro de Transportes, nunca tuvo «sospechas» de que estuviera involucrado en negocios turbios.

La comparecencia giró en torno a la posible implicación de Ábalos y su conexión con Koldo García y Víctor de Aldama, empresarios detenidos en el marco de la investigación. El ministro enfatizó que no tenía relación personal con ellos, salvo haber coincidido en actos institucionales, y recalcó que no había tenido conocimiento previo de las detenciones ni de la trama antes de que salieran a la luz.

Además, Grande-Marlaska mostró respeto por las resoluciones judiciales derivadas de los informes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, aunque subrayó que no había leído personalmente dichos documentos y solo tenía conocimiento del caso por lo publicado en los medios y notas de prensa.

También defendió la contratación de mascarillas con la empresa Soluciones de Gestión, implicada en el caso, y aseguró que el proceso se realizó correctamente dentro del Ministerio del Interior, aunque no descartó que personas ajenas a su departamento hubieran cometido irregularidades.

En resumen, Grande-Marlaska negó cualquier vinculación de su Ministerio y del propio Ábalos con la trama de corrupción y afirmó que no hubo sospechas previas sobre la posible implicación de Ábalos en negocios ilegales.

El ‘Delcygate’

Además, Marlaska ha sido preguntado por la visita a España autorizada por Pedro Sánchez de la presidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, y sobre la entrada de 40 maletas de equipaje que se llevó una furgoneta de la embajada venezolana. El ministro dice estar «convencido» de que esas maletas no entraron en España, a pesar de que testigos presentes aquella noche certificaron ante notario que el equipaje sí salió de la terminal ejecutiva.

«Estoy convencido de que no pasaron las maletas, porque la actuación de los funcionarios policiales fue correcta», ha señalado Marlaska a preguntas del PP sobre aquel suceso, del que el ex ministro de Transportes, José Luis Ábalos, avisó días antes al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con un mensaje de texto.

Según el ministro del Interior, Delcy nunca llegó a entrar en espacio Schengen, asegurando que no atravesó el control policial de la terminal ejecutiva, aunque fuesen alojados temporalmente en una de las salas VIP. Sin embargo, sí hay testigos que afirman y acreditan ante notario haber presenciado la salida de ese equipaje en dos carros portamaletas hacia la zona exterior de la terminal, donde fueron introducidos de madrugada en un vehículo de carga de la embajada venezolana.

«El personal de Sky Wallet traslada dos carros con maletas al exterior de la zona pública para ponerlos en los vehículos sin pasar ningún control de aduanas», relató entonces, ante notario, uno de los guardias de seguridad presentes en Barajas aquella noche.