España
GUARDIA CIVIL

Marlaska compra 20.000 calcetines térmicos a la Guardia Civil mientras tiene cuarteles sin calefacción

El Ministerio del Interior de Fernando Grande-Marlaska ha licitado la compra de más de 20.000 pares de calcetines térmicos para repartir entre comandancias de la Guardia Civil de toda España. Los agentes dispondrán, así, de esta prenda esencial para protegerse del frío del invierno, mientras desde las asociaciones del Cuerpo se acusa a Interior de las condiciones que sufren en algunos cuarteles de España en los que no hay calefacción.

La Jefatura de Asuntos Económicos de la Guardia Civil ha iniciado la búsqueda de un suministrador de calcetines técnicos térmicos, con un presupuesto base de 242.000 euros. El precio máximo de las ofertas por cada par será de 10 euros (IVA no incluido).

Con esa partida, la Guardia Civil dotará al menos a sus agentes de 20.000 pares de calcetines elaborados con fibra hueca térmica, pensados para mantener la temperatura corporal en los pies. Algo especialmente útil en las fases más frías del invierno.

La licitación no ha pasado desapercibida para agentes y asociaciones del cuerpo, que señalan que mientras Interior compra calcetines para el frío «sigue sin solucionar el problema de las calefacciones en los cuarteles».

La última denuncia al respecto se conoció hace menos de una semana, cuando la Asociación Española de la Guardia Civil alertó que en puestos como los de Jávea, Pedreguer o Pego (Alicante). En los últimos meses, han llegado a la Dirección General quejas semejantes de una docena de cuarteles en Andalucía, Asturias, Galicia o Castilla y León, entre otros.

«Seguimos en el mismo punto que estábamos: si los agentes no quieren trabajar en un ambiente helado, sin guantes o abrigos, son ellos mismos los que deben poner una solución al problema llevando de sus casas los calefactores», denuncian desde AEGC. Una situación que se complica para aquellas unidades que hacen turnos de noche en temperaturas inferiores a los 5 grados.

El problema de la calefacción -y también del aire acondicionado en verano- es endémico en los cuarteles de la Guardia Civil. En el cuartel de Majadahonda (Madrid) decidieron comprar 250 radiadores de aceite para que los agentes no sufran en el interior del edificio las duras temperaturas del invierno. Por no hablar de la situación que se encontraron los agentes durante la llegada del temporal invernal Filomena, que pilló a la Guardia Civil sin ropa adecuada pese a habérsela solicitado anteriormente a Marlaska. Caso aparte fueron las críticas de los agentes que protegían el chalet del ex vicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias desde una caseta sin calefacción, teniendo que refugiarse en sus vehículos patrulla.

Órdenes

En parte, el origen de estos problemas tiene que ver con el sistema de calefacción obsoleto que hay en muchos cuarteles de España. Pese a que Interior ha iniciado un plan para renovar cuarteles y hacerlos energéticamente más eficientes, en muchos de los puestos aún no han llegado esas mejoras.

Según denuncian fuentes de la Guardia Civil, hay otros puestos en los que el problema viene dado por las órdenes explicitas de superiores para reducir el consumo de calefacción, restringiendo por ejemplo la calefacción de los vestuarios a horas muy concretas del día y a una temperatura máxima de 19 grados, en cumplimiento del decreto energético impulsado por el Gobierno de Pedro Sánchez que entró en vigor el pasado verano.