Arrimadas: «Si no ganamos y el procés se alarga, se cargarán Cataluña»
Apenas han pasado cinco años desde que Inés Arrimadas decidiera aparcar la abogacía para dedicarse profesionalmente a la política. Hoy, a menos de dos semanas para las elecciones en Cataluña, Arrimadas cuenta con posibilidades reales de hacer historia, convirtiéndose en la primera presidenta al frente de la Generalitat de Cataluña. Mujer, joven y no nacionalista, una ecuación imposible hace unos meses y que, sin embargo, puede hacerse realidad en un momento clave para la historia de Cataluña y de España. Si como el CIS ha adelantado, el partido naranja logra ser la formación más votada, la política de pactos no podrá ser inmune al mensaje de las urnas. No obstante, Arrimadas es muy consciente de que el cambio de cromos en Cataluña se antoja farragoso y que el final del procés sólo será posible con un juego de equilibrios que pasa por lograr el voto favorable de populares y, más difícil aún, de socialistas, junto con la abstención de unos comunes cuyos guiños al independentismo son constantes. La candidata de Ciudadanos hace un hueco en su agenda de campaña para charlar con OKDIARIO sobre el futuro inmediato de Cataluña.
P.- Candidata a la presidencia de la Generalitat… y parece que lo tiene bastante cerca, según las encuestas.
R.- Bueno, bueno, lo importante es el resultado el día 21. No va a ser fácil en ningún caso, así que hay que ir a votar y que nadie se confíe con las encuestas.
P.- Pero ¿se lo cree o no?, ¿qué le dicen sus encuestas internas?
R.- Todas las encuestas, todas, lo que dicen es que es posible ganar al independentismo en las urnas, que es posible hacer historia porque por primera vez podemos ganar los partidos no nacionalistas. Y, por tanto, como es posible -no digo que sea fácil, es realista-, pues hay que luchar hasta el final para conseguirlo. Y ahí estamos, luchando. Y sobre todo animando a la gente a ir a votar, porque es la única clave. Si vamos a votar, ganamos.
P.- Este jueves en Bélgica, en Bruselas, hubo una manifestación del independentismo con Puigdemont a la cabeza y 45.000 personas, según la policía belga. Hágame una valoración.
R.- La valoración de las manifestaciones hay que hacerlas el día 21 en las urnas. Ha habido muchas manifestaciones en los últimos años. La verdad es que las últimas a favor de la unión de todos los españoles han sido espectaculares, más de un millón de personas. Por tanto, la movilización ya está demostrada, las dos partes ya están movilizadas. Pero, desde luego, la mayor movilización es la que se tiene que hacer el día 21 yendo a votar. Porque si vamos a votar, ganamos. Y creo que hay que dejar de pensar tanto en lo que hacen los partidos independentistas, sino en qué hacemos nosotros para sacar a la gente a votar.
P.- Esta muestra de ‘músculo’, ¿usted cree que perjudica a Cataluña?
R.- La imagen que está teniendo Cataluña ahora mismo no es de seriedad, de tranquilidad, no es de admiración. Es de preocupación. Yo he ido a Bruselas, y no como el señor Puigdemont a huir, sino a reunirme con representantes de las instituciones europeas. Me he reunido con el vicepresidente del Parlamento europeo, me he reunido con miembros del Comité de las Regiones, etc, cosa que no puede hacer el ex presidente Puigdemont porque no le recibe nadie. Pero el tema es que la imagen que estamos dando de Cataluña no es una imagen buena, es de inestabilidad. Por eso están bajando las inversiones, por eso no vienen turistas.
P.- Este puente, además, ha sido muy significativo…
R.- Ha sido dramático. Porque, mientras en otras zonas de España están con unos porcentajes de ocupación enormes y altísimos, en Cataluña se está sufriendo.
P.- En Barcelona, en concreto, hay que decir que casi un 30% menos sobre las previsiones de ocupación que había el año pasado.
R.- Es lamentable. Es que esto no lo aguanta nadie. Por eso el 21 tenemos la oportunidad de acabar con el ‘procés’, porque si vuelven a gobernar los mismos van a volver a hacer lo mismo. Y vamos a tener cuatro años más de ‘procés’, y eso la economía y la sociedad catalana no lo aguantan. Hay que acabar con el ‘procés’ e iniciar una nueva etapa de sentido común, de convivencia, de reformas, de diálogo.
P.- Es verdad que las encuentas lo que manifiestan es que hay dos bloques muy definidos y la postura que adopten ciertos partidos va a ser determinante. Uno de ellos es el PSC, que ya ha dicho en alguna ocasión que a usted no la van a apoyar como presidenta de la Generalitat. ¿Usted qué cree que va a hacer el PSC finalmente?
R.- Yo creo que cuantos más votos tenga el señor Iceta más tentaciones va a tener de ser presidente a toda costa. Y eso, a lo mejor, va a ser haciendo al señor Junqueras vicepresidente, haciendo otro tripartito. Yo lo que creo es que la mejor alternativa para el día 21 es, obviamente, que los partidos constitucionalistas saquemos más escaños que los partidos independentistas y que el resultado sea, como dicen todas las encuestas, claramente favorable a Ciudadanos. Porque si el resultado es muy claro el señor Iceta va a tener menos tentaciones de reeditar un tripartito con Esquerra. Hay que recordar que el señor Iceta hizo los dos tripartitos, definió los dos tripartitos, le dio Educación a Esquerra. Por tanto, ¿certeza de lo que va a hacer el PSC? No se sabe, porque hoy en día gobierna con ERC en muchos ayuntamientos y, con partidos separatistas, en muchos ayuntamientos. Pero si dan los números, evidentemente, a mí me gustaría que por primera vez no se equivocara, que, por primera vez, si el resultado es claramente favorable a nosotros, no vuelva a reeditar un tripartito y diga “me apunto a un gobierno de cambio, a un gobierno no nacionalista, a un gobierno de consenso, con independientes, pero que devuelva la tranquilidad y el sentido común a Cataluña”.
P.- ¿Ésa es su propuesta?, ¿si los números les salen, usted presidiría, la vicepresidencia sería para el señor Iceta y, luego, formaría ese gobierno de independientes?
R.- Bueno, a ver, yo no quiero repartir las sillas antes de tenerlo. Tenemos que salir a votar, tenemos que ganar y tenemos que llegar a un acuerdo. Porque a ver si ahora nos estamos repartiendo las consejerías y luego resulta que no podemos gobernar. Vamos a votar en masa y vamos a ganar. Y después, yo me comprometo a hacer todo lo que esté en mi mano para sumar con el resto de fuerzas no independentistas. Yo contaría con el Partido Socialista en mi gobierno, sin duda, porque yo creo que los necesitamos para sumar escaños, los necesitamos para formar una alternativa de gobierno sólida. Pero yo quiero incorporar en ese gobierno también, junto con otros partidos, a personas independientes. Porque en Cataluña hay muy buenos profesionales que no han estado en la gestión pública porque han estado trabajando, pero que no son los típicos políticos de 35 años que no han hecho otra cosa que trabajar en política.
P.- Como usted hasta hace relativamente poco tiempo…
R.- Yo, hasta hace cinco años, era una profesional del sector privado. Por tanto, a mí me parece que es bueno incorporar a personas que conozcan la vida diaria, que conozcan el mundo real. No digo que sólo sean personas independientes sino que los independientes puedan reforzar ese gobierno. En primer lugar, creo que va a ayudar al consenso. Es mucho más fácil llegar a un consenso con gente que tiene una trayectoria impecable y, a lo mejor, no tiene una trayectoria política, que con gente que no ha pegado un palo al agua en la vida, pero son muy de partido. Y segundo, creo que necesitamos seriedad y buena gestión. Hacen falta políticos, experiencia política, pero también independientes con profesión y con una experiencia fuera de la política.
P.- Imaginémonos que la tentación del PSC es muy fuerte para reeditar una vez más ese tripartito, ¿usted estaría dispuesta, aunque tenga más votos que el PSC, a ceder la presidencia al señor Iceta en aras de que el constitucionalismo se haga con la Generalitat?
R.- Es que, insisto, quien va a liderar la alternativa al nacionalismo en Cataluña, no lo voy a decidir yo, ni lo va a decidir el señor Iceta, ni lo va a decidir el señor Domènech…, lo van a decidir los catalanes, los catalanes votando en unas elecciones tan especiales como éstas. En otras elecciones podemos hablar de todo, pero en éstas creo que va a haber que mirar clarísimamente cuál es el resultado de las urnas. Los catalanes van a decidir si quieren que esa alternativa al nacionalismo la lidere el señor Iceta o la lidere yo. A lo que sí me comprometo, es que, si el señor Iceta es el candidato más votado, yo, desde luego, me pondré a su disposición, insisto, no para que reedite un tripartito con Esquerra, que es la tendencia natural, sino que haga un gobierno con nosotros.
P.- ¿Usted cree que hay posibilidad de unas segundas elecciones, de que se tenga que votar dos veces?
R.- Yo espero que no. Espero que ganemos y sumemos. Si ganamos y sumamos, no hay segundas elecciones, no hay más ‘procés’, no hay más independencia, no hay más empresas que se vayan y no hay más familias que se rompan. Pero tenemos que sacar a la gente a votar el día 21 y, luego, ser responsables. Yo garantizo a todo el mundo que voy a ser responsable, generosa y voy a ceder. Y voy a ser muy consciente del momento en el que estamos. Lo que me gustaría saber es si el resto de partidos constitucionalistas lo van a ser porque tengo la sensación de que se dedican a vetarnos y a atacarnos, a decirnos que no.
P.- Y los comunes, ¿qué son?
R.- Los comunes tienen un problema: sus dirigentes son mayoritariamente independentistas -la número dos de la lista ha dicho públicamente que ella es independentista, o la señora Colau ha votado a favor de la independencia, ha ido a las manifestaciones independentistas, etcétera-, pero sus votantes no son mayoritariamente independentistas. Por tanto, ahí tienen una disyuntiva. Entonces, si no les necesitáramos sería fantástico, si sumáramos las fuerzas netamente constitucionalistas sería idóneo. Ahora, si les necesitamos con una abstención (porque ya no estoy hablando ni de que se metan en el gobierno, sino simplemente de que con una abstención), podrían acabar con el ‘procés’, no alagarlo, y priorizar las políticas sociales. Entonces, yo les propondré, si llega ese caso, un pacto para priorizar las políticas sociales y coger todo el dinero que se están gastando en independencia (en el ‘procés’, en las estructuras de Estado) y meterlo en Dependencia, en Educación y en Sanidad. A ver qué me dicen los comunes, a ver si me dicen que no.
P.- A cambio de la abstención…
R.- A cambio de una abstención. A ver si me dicen que no, que quieren alargar el ‘procés’ y que quieren dejar que en Cataluña se sigan destinando centenares de millones de euros al ‘procés’.
P.- ¿Usted de dónde creen que van a estar más cerca, de la abstención o de votar a favor de ese bloque independentista?
R.- Yo creo que cuantos menos votos tengan menos tentaciones van a tener de seguir con el ‘procés’ porque verán en las urnas que esa indefinición les penaliza. Yo lo único que digo es que estamos en unas elecciones claves para la historia de Cataluña y para la historia de España. Hay partidos que somos nítidos, claros, no hay matices en lo que vamos a hacer, no engañamos; y hay partidos que los vas a votar sin saber exactamente dónde va a acabar tu voto.
P.- ¿De dónde le están viniendo a Ciudadanos sus votos?
R.- A nosotros nos vienen de gente de la abstención, porque no olvidemos que la población que se ha abstenido tradicionalmente en Cataluña es población a favor de seguir dentro de España y de seguir dentro de Europa. Por tanto, nos viene mucha gente de la abstención, mucha gente del Partido Popular, mucha gente del Partido Socialista y muchísima gente de Podemos, que votó a Podemos en las generales pero que no es independentista. Por tanto, el voto central, el voto transversal, la lista unitaria de los que queremos seguir dentro de España y de la Unión Europea, es Ciudadanos. Porque nos viene voto de diferentes ideologías, de diferentes partidos, porque somos el voto central ganador ante la pesadilla del ‘procés’ y de que se alargue cuatro años.
P.- Hay gente que dice, desde el gobierno, que el ‘procés’ ha muerto.
R.- No, el ‘procés’ ha muerto si ganamos el 21 de diciembre. Si no ganamos el 21 de diciembre, el ‘procés’ se alarga cuatro años más y se cargan definitivamente Cataluña. La economía de Cataluña, el nombre de Cataluña en el mundo, las familias catalanas, la sociedad catalana. Por tanto, el ‘procés’ no ha acabado, el ‘procés’ acabará si ganamos en las urnas el 21 y si nos ponemos de acuerdo para gobernar desde el sentido común, la seriedad y el respeto a todas las ideologías en Cataluña.