Guardias civiles advierten a Marlaska que sus nuevos uniformes ‘low cost’ se rasgan en caso de peleas
Los agentes de la Guardia Civil ven con preocupación la nueva licitación para ropa y uniformes que prepara el Ministerio del Interior. Una licitación cuyos pliegos han rebajado ciertas exigencias del pasado para, dicen, dar entrada así a ofertas low cost que salgan más baratas al Estado, a costa de una peor calidad. El Ministerio lo niega, alegando que va a gastar «cuatro euros más» por uniforme que en anteriores compras -aunque sin tener en cuenta la inflación de precios-, pero hay asociaciones que ya han solicitado paralizar el concurso. Advierten que las nuevas prendas tienen menor resistencia a la tracción, por lo que pueden romperse y rasgarse ante un forcejeo. Una situación cada vez más común durante sus servicios, con el aumento de agresiones a guardias civiles.
Jucil, la asociación que ha solicitado la paralización, basa su petición en que, «en el actual anuncio, a diferencia de anteriores licitaciones, los pliegos de prescripciones han variado de una manera sustancial en el caso de las botas y zapatos respecto de las actualmente vigentes».
«En el resto de los artículos hay cambios significativos», precisa el escrito enviado a la Dirección General de la Guardia Civil y firmado por el secretario general de la asociación profesional, Ernesto Vilariño. En el caso del pantalón técnico, se demanda así la paralización porque «han variado parámetros en cuanto al color del uniforme y se ha reducido el marcador de la actividad antibacteriana», apunta Jucil.
Forcejeos
«Se ha detectado otro parámetro modificado: ‘la resistencia a la tracción’, que actualmente se cambia por perforación. En la situación actual, en la que los agentes de la autoridad sufren numerosos atentados y agresiones, sorprende que se reste importancia a la tracción que sufra la uniformidad, lo que se consideraba en el pliego de la licitación anterior como ‘defecto mayor’ mientras en el actual no tiene consideración alguna», especifica la asociación profesional Jucil.
En el pliego del nuevo contrato, que alcanza los 8,3 millones de euros, «se prima en el sistema de baremación de ofertas una serie de criterios relacionados con el precio de los productos, reduciendo exigencias en cuanto a la calidad». Desde la organización profesional de guardias civiles AUGC han denunciado que se han producido modificaciones en los pliegos «y rebajado la calidad con el objeto (suponemos) de que puedan entrar en el concurso empresas que ofrecen ropa a bajo coste».
Fue la propia Guardia Civil la que puso en conocimiento estos cambios a las empresas que suelen licitar los concursos para dotarles de uniformes, a quienes advirtió que «los requisitos técnicos de los citados artículos han variado de forma sustancial (bota y zapato) respecto a las prendas actualmente vigentes, y en el resto de artículos hay cambios significativos».
«Cuatro euros más» por uniforme
Sin embargo, pese a esa reducción de la calidad para dar entrada a firmas low cost, Interior señala a través de una respuesta por escrito del Gobierno en el Congreso de los Diputados que «conviene aclarar, en primer término, que el Ministerio del Interior no ha apostado por la disminución de la calidad de ninguna de las prendas que conforman la uniformidad del Cuerpo de la Guardia Civil»
«En este sentido, cabe señalar que el importe de licitación del pantalón y la cazadora técnica que figura en el expediente actualmente en vigor para la adquisición de las referidas prendas ha sido incrementado en cuatro euros respecto al importe del año anterior».
Un argumento que ha sorprendido a los propios agentes, que, consultados por OKDIARIO, se preguntan, con cierta estupefacción, si el Gobierno «no se ha enterado de que respecto a 2021, año de la última licitación, los precios se han disparado».
Algunas asociaciones, como el caso de AUGC, anunciaron la presentación de una denuncia ante Inspección de Trabajo para que analizase esta reducción de la calidad exigida. Además, indicaron que realizarían un «exhaustivo seguimiento de la licitación para ver la adjudicación, así como, una vez se distribuyan y entreguen las prendas, el resultado de las mismas».
«Nos tememos que lo barato no sólo puede poner en riesgo la salud de los trabajadores, sino también salir caro a la larga si la duración de las prendas se reduce considerablemente, así, además del calzado, hemos notado cambios significativos en otras prendas como cazadora y pantalón técnico».
De hecho, los criterios de calidad de prendas eran, hasta ahora, idénticos que los que utilizaban los Mossos d’Esquadra para sus uniformes. Cabe recordar que el Gobierno acaba de regar al cuerpo policial catalán con más de 1.600 millones de euros extra, a la par que el Gobierno de Sánchez se ha ido apoyando en los partidos independentistas.