España

Denuncian ante el Papa Francisco el apoyo de la Iglesia catalana al golpe de Estado separatista

El presidente de la asociación suiza Cataluña pueblo de España, François Meylan, ha dirigido una carta al Papa Francisco en la que le pide que le reciba en audiencia para expresarle su preocupación por la implicación de amplios sectores de la Iglesia catalana en el golpe de Estado separatista de Carles Puigdemont y Quim Torra.

La carta ha sido remitida este sábado desde Lausanne y está encabezada con un titular que no deja lugar a dudas: «Apoyo a delincuentes y golpistas de miembros de nuestra Iglesia en la autonomía catalana». El escrito está acompañado de un dossier de 24 páginas, que recoge decenas de casos del apoyo de la Iglesia catalana a los golpistas: desde la colocación de banderas esteladas en el campanario de las parroquias, a la colaboración de sacerdotes para ocultar las urnas del 1-O o las declaraciones de las monjas independentistas Sor Lucía Caram y Teresa Forcades.

«Su Santidad Francisco», comienza el escrito, «mediante esta carta queremos hacerle partícipe de nuestra gran preocupación por nuestra santa Iglesia. El comité Cataluña pueblo de España se constituyó en Lausanne, la pasada primavera, para arrojar luz sobre el intento de golpe de Estado que tuvo lugar en Cataluña el 6 y 7 de septiembre de 2017. Somos todos voluntarios y activistas tanto en Suiza y en la autonomía catalana, como también en Madrid, Valencia, Alemania, Francia y Bruselas».

A continuación, los representantes de la asociación, François Meylan y Patricia González, denuncian ante el Pontífice la «la participación reiterada de miembros responsables de la casa de nuestro Padre junto con los delincuentes y golpistas vinculados al aparato separatista catalán que, recordemos, ha decidido situarse fuera de la ley y la moralidad y no representa en modo alguno a toda Cataluña y sus 7,5 millones de habitantes».

Primera página de la carta remitida este sábado al Papa Francisco.

Por este motivo, y a la espera de que el Papa pueda recibirles en audiencia, le hacen llegar un amplio informe, fruto de una «investigación meticulosa» sobre el apoyo de la Iglesia catalana a los golpistas de la Generalitat.

François Meylan señala que un sector del clero catalán pretende colocar a la Iglesia «en el mismo camino de unos delincuentes que han elegido como único medio de expresión la mentira, la propaganda política, la violencia física y psíquica y el supremacismo. Este tipo de actuaciones no se acomoda en absoluto con las premisas mínimas de una democracia moderna, tal como nosotros la entendemos; ni con los valores  propios del  Cristianismo».

El informe enviado al Vaticano incluye decenas de fotos de Iglesias de Cataluña que exhiben banderas esteladas independentistas o carteles que reclaman la libertad de los golpistas que cumplen prisión preventiva. También recoge numerosas informaciones periodísticas sobre religiosos como el monje del monasterio de Montserrat Sergi d’Assís, que en septiembre de 2017 pronunció ante sus fieles un sermón en el que defendía el referéndum ilegal convocado por Puigdemont.

La carta remitida al Vaticano por la asociación suiza Cataluña pueblo de España.

El dossier también se hace eco del manifiesto difundido el mismo mes, en el que 380 párrocos catalanes acusaban al Estado español de «atentar contra la dignidad y la libertad de las personas», por impedir el referéndum ilegal. Los firmantes instaban a sus fieles a desobedecer las leyes españolas porque «el Evangelio es nuestra legalidad».

Del mismo modo, llegará a manos del Papa Francisco la documentación sobre los curas catalanes que colaboraron con la organización del 1-O ocultando las urnas en sus Iglesias. Y sobre los religiosos que cedieron sus templos –como el párroco de la Iglesia de Sant Pere de Figueres– como centro de votación. En la iglesia de Vila-rodona (Tarragona), el recuento de votos se hizo junto al altar, mientras el cura oficiaba la misa.

En la Iglesia de Nuestra Señora de Pompeya, situada en la Diagonal de Barcelona, el párroco pidió a sus fieles que rezaran por el éxito del 1-O, como informó OKDIARIO. En la misa se repartió un documento, con el anagrama de la ANC, para que los fieles entonaran la oración a la estelada: “Ofrecemos como símbolo de compromiso, una señera, un triángulo azul y una estrella blanca de votación para el referéndum”. Tras desplegar una estelada ante el altar, los devotos exhibieron como ofrenda una papeleta de voto, “como símbolo del compromiso con la autodeterminación que permitirá decidir el futuro del pueblo”.

El dossier muestra decenas de fotos de esteladas colocadas en Iglesias catalanas.

De este modo, el clero ha expulsado de las parroquias a más de la mitad de los catalanes, que no aceptan su doctrina excluyente separatista. En el dossier remitido al Vaticano no podía faltar un clásico: sor Lucía Caram. La monja peronista utiliza habitualmente las redes sociales para difundir su propaganda a favor del golpe de Estado.

Los tanques han entrado por la Diagonal, pero a fuego lento”, sentenció la monja independentista sobre la aplicación del artículo 155 de la Constitución. También ha comparado a los Jordis con las víctimas de torturas en la dictadura argentina.

El dossier muestra decenas de fotos de esteladas colocadas en Iglesias catalanas.

Y ha pedido que el Rey Felipe VI no visite Cataluña porque “estrecha manos saudíes manchadas de sangre”. Mientras aplaude al ex entrenador del Barça Pep Guardiola, que ha hecho buena parte de su fortuna a sueldo de dos tiranías sanguinarias de Oriente Medio: Qatar y Emiratos Árabes.

El dossier enviado al Papa Francisco también recoge una reciente entrevista en la que la monja Teresa Forcades animaba a los catalanes a «morir por la independencia».