Economía
Inversión

Un verano de hastío…

Reconozco que me aburre. Me aburre que los mercados dependan de las decisiones de los bancos centrales, del ‘Brexit’ y de cómo se levante Trump, su incontinencia digital y la respuesta de los chinos. ¡Qué daño nos ha hecho Twitter y sus 140 caracteres del diablo!

Estos días de poco movimiento, me permiten leer muchos blogs y opiniones de mercado, y sobre todo, reflexionar a posteriori viendo con más perspectiva que la absoluta inmediatez de las reacciones diarias del mercado.

La teoría de la diversificación de los activos en la inversión es la piedra angular sobre la que los inversores profesionales basan su estrategia. Y para llevarla a cabo, hay que ser muy disciplinado. Esa disciplina ha sido francamente difícil de mantener ante la evidencia de que desde el suelo de mercado del 2008-2009 en la crisis financiera, cualquier cosa que ha podido hacer un inversor para diversificar su cartera del S&P500, le ha restado de rentabilidad. Y 10 años son muchos años para testar la diversificación y soportar los resultados adversos derivados de la misma.

Tampoco ha funcionado la diversificación entre acciones “value” y acciones “growth”, compañías que están infravaloradas respecto a la cotización de su precio versus compañías que priman el crecimiento de los beneficios de las empresas. Es muy duro convencer a los inversores que después de 10 años, eventualmente, las acciones “value” finalmente batirán a las “growth”. Pero hemos visto algo parecido cuando en los años 90s, Warren Buffett, inversor “value” por antonomasia, era denostado por los inversores de las ya famosas “punto com”. También sabemos lo que pasó con las tecnológicas a continuación.

Adjunto la rentabilidad a cierre de junio de los mercados americano, internacional, emergente y de bonos agregados:

Digamos que la historia puede no repetirse, pero pueden aparecer episodios parecidos. Si vemos los resultados de los índices de los últimos 10 años, vemos como el índice del S&P500 ha batido a los mercados de renta variable internacional y a los emergentes, ni que decir a los de bonos.

¿Podemos esperar que cambie la situación y que finalmente la diversificación aporte valor a las carteras? Me parece complicado de ver en estos momentos, en los que estamos todos pendientes de si baja tipos la Fed a final de mes…. Pero habrá que estar atento.