Economía
Recibo de la luz

La subida de la luz que no evitó el Gobierno golpeará a 1,3 millones de hogares con bono social

Los consumidores más vulnerables también sufren la escalada del precio regulado de la electricidad

Pensionistas con bajos ingresos, familias numerosas o personas cuyos recursos se hayan visto seriamente reducidos por la crisis del Covid-19. Estos grupos vulnerables serán los principales afectados por la subida del precio de la luz, a pesar de que en teoría disfrutan del famoso bono social que debería rebajar su factura. La electricidad ha alcanzado durante este mes de enero máximos históricos ante la inacción del Gobierno de Pedro Sánchez, que no ha tomado ninguna medida para impedir dicho incremento.

Estamos hablando de 1,3 millones de hogares en nuestro país que se encuentran en situación de vulnerabilidad y que disfrutan del bono social anunciado a bombo y platillo por el Gobierno.  El numero de hogares que se acogen a él se ha incrementado en un 11,5% desde 2018, lo que supone más de 14.000 familias en los últimos dos años.

El bono social, que consiste en un mecanismo de descuento de entre el 25%  y el 40% sobre el precio regulado de la luz en función de los criterios marcados por el Ejecutivo, se ha convertido en un arma de doble filo para estas personas: al tener una tarifa vinculada al mercado regulado para poder disfrutar de esta reducción de importe, son más susceptibles a las variaciones en el precio y asumen de lleno el incremento en la factura de este mes de enero como consecuencia de la borrasca Filomena. Es decir, aunque tengan un descuento sobre la tarifa oficial, si dicha tarifa sube, también aumenta lo que los beneficiarios del bono social pagarán en el recibo de este mes.

Los más de 158.000 jubilados que disfrutan del bono social del Gobierno -y que a partir de este mes de enero comenzaban a recibir el incremento del 0,9% en sus pensiones, lo que supone un subida de entre siete y diez euros- verán como esa subida se ve anulada en la práctica por la subida del precio de la luz, que según la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, oscilará entre 4 y 10 euros para más de 10 millones de hogares, entre ellos los jubilados que disponen de tarifa con bono social.

La subida de la luz es consecuencia del sistema de precios marginalistas que funciona en nuestro país. Este sistema consiste en ir cubriendo las necesidades de demanda para cada hora del día con las ofertas de generación más económicas, pero la última oferta que sea necesaria para cubrir la demanda, será la que marque el precio de la totalidad de la generación de energía durante esa hora concreta. Y como durante la nevada no ha habido apenas generación renovable y se ha disparado la demanda, ha sido necesario utilizar las centrales de ciclo combinado que funcionan con gas, justo cuando este combustible ha multiplicado su precio por la ola de frío en todo el mundo.

Colectivos vulnerables, los principales afectados

Uno de los requisitos imprescindibles para poder disponer del bono social es tener una tarifa del mercado regulado, así como que el consumidor está acogido al precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC) o, en caso de no estarlo, que acepta la formalización de un contrato con la comercializadora de referencia acogido a PVPC.

Por tanto, todos aquellos considerados consumidores vulnerables como pensionistas, familias numerosas y personas cuyos ingresos se hayan visto seriamente reducidos por la crisis del covid-19 verán el incremento en la factura durante este mes de enero.

Aparte de los pensionistas, más de 323.500 familias numerosas, así como más de 819.800 familias con un bajo nivel de ingresos que disfrutan de esta reducción que ofrece el bono social, van a ver cómo sus facturas aumentan durante este primer mes de 2021. Y no solo ellos. Las 98.188 nuevas familias que han solicitado esta ayuda entre los meses de marzo y julio por el castigo de la pandemia, también sufrirán este incremento.

Algunas compañías eléctricas ya han comenzado a avisar a sus consumidores de este incremento en su factura a través de SMS, en lo que se estipula una subida media de más de cinco euros con respecto al importe del recibo de la luz de mes de diciembre.

Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) señalan que, a pesar de este incremento en las subidas, las tarifas del mercado regulado con bono social siguen siendo las mas bajas del mercado y advierte a los consumidores que tengan cuidado con las ofertas que puedan recibir de tarifas del mercado libre.

¿Cómo solicitar el bono social?

El bono social de luz es un descuento en las facturas de electricidad, aplicado a aquellos hogares en riesgo de pobreza energética debido a sus condiciones socioeconómicas. Para ello es necesario cumplir con dos requisitos: tener contratado el precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC) y cumplir con los requisitos de renta establecidos.

El PVPC es el contrato eléctrico establecido por el Gobierno en el que lo pagado por la electricidad consumida es directamente el precio de la energía que resulta del mercado, más impuestos y peajes, sin incluir otros productos o servicios adicionales. Sólo puede contratarse el PVPC si se tiene una potencia contratada igual o inferior a 10kW.

El descuento del bono social puede ser de un 25% o un 40%, tanto en el término potencia como en el término de la energía de la factura. Los usuarios considerados como consumidores vulnerables severos en riesgo de exclusión social no tendrán que pagar nada en su factura de la luz. Entre el descuento ofrecido por parte de la comercializadora y de las ayudas otorgadas por la comunidad autónoma quedarán exentos de abonar el importe de su factura.