Rafael del Pino pone en marcha el plan para que Ferrovial cotice en Wall Street antes de que acabe el año
Tras las presiones a la empresa, el gobierno "respeta" pero encaja mal el traslado e insiste en tomar "medidas contundentes"
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Rafael del Pino, presidente y primer accionista de Ferrovial, consiguió ayer el respaldo mayoritario de la junta general a su proyecto de trasladar la sede de la empresa a Ámsterdam mediante una fusión inversa con su filial neerlandesa, Ferrovial Internacional Sociedad Europea (Fise). Con el 77,6% del capital presente en la junta, el 93,3% de los asistentes apoyó la estrategia diseñada por el consejo.
A partir de ahora, los equipos de la compañía se centrarán en el desarrollo del plan con el que esperan conseguir convertirse, antes de que acabe el año, en la primera empresa cuyas acciones cotizan directamente en Wall Street.
Hasta el momento, las empresas españolas que cotizan en el mercado de valores estadounidense lo hacen a través de unos títulos representativos de acciones conocidos como ADR (American Depositary Receipt). El plan de la compañía es que las acciones de la nueva Ferrovial Internacional SE coticen este mismo ejercicio y de forma simultánea en las bolsas de Madrid, Ámsterdam y Nueva York.
Una vez aprobada la fusión inversa (en la proporción de un título de Ferrovial por cada acción de Fise) hay que esperar a que se cierren los plazos legales de ejecución del derecho separación y del periodo de oposición a la misma que la ley contempla para los acreedores de la empresa. Eso ocurrirá entre el 14 y el 20 de mayo próximos.
Las condiciones del acuerdo incluyen tres cláusulas suspensivas entre las que destaca que el desembolso a realizar a los accionistas que se acojan al derecho de separación no supere los 500 millones de euros; eso supone que si el 2,56% del accionariado total se opone y exige la recompra de sus títulos, la fusión no será posible.
A ello se une que las acciones de Fise sean admitidas a negociación en los tres mercados: Euronext Ámsterdam, BME (las bolsas españolas) y Wall Street.
Mientras, probablemente en los próximos quince días, se producirá la publicación del acuerdo de fusión adoptado por la junta en el Boletín Oficial del Registro Mercantil.
Concluido esos plazos, el inicio del segundo semestre (junio próximo) será el momento en que se haga efectiva la fusión por absorción de Ferrovial por parte de Fise. A partir de ahí será el momento en que se lleve a cabo la cancelación del asiento registral de Ferrovial en el Registro Mercantil madrileño y su posterior registro en Países Bajos de los cambios producidos en Ferrovial Internacional SE.
Cerrada la fusión Ferrovial Internacional Sociedad Europea pasará a denominarse Ferrovial SE.
El siguiente paso, probablemente en julio, será la solicitud de la admisión a cotización -y posterior negociación- de las acciones de la nueva Ferrovial SE en las bolsas de Ámsterdam, y los mercados de valores españoles para, a continuación, excluir de la cotización las acciones de Ferrovial en España. Algo que debe ocurrir alrededor de agosto.
Si todo sale como tiene previsto el equipo del grupo constructor y de concesiones, conseguirá que a final de año se produzca la admisión a negociación de los títulos de Ferrovial SE en EEUU.
Respuestas políticas
Los aplausos de los accionistas presentes y representados en la junta de ayer (más del 74%) no parecieron suficientes al gobierno que, solo tres días antes de la junta, pidió a la empresa que reconsiderara su marcha. Ayer, las reacciones de ministros se sucedieron en cadena.
El gobierno, a través del Ministerio de Asuntos Económicos que encabeza la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, manifestó su respeto por la decisión de Ferrovial, aunque insistió en que va a continuar trabajando «de manera constructiva con todas las empresas españolas para defender sus intereses e impulsar su expansión y crecimiento».
Más contundente fue la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz que, a través de sus redes sociales calificó de «inaceptable» la decisión de Ferrovial que, dijo: » Ha generado indignación en nuestro país».
Por su parte, la líder de Podemos y ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, aseguró que la operación supone «reírse a la cara de los españoles que, con su dinero, dieron ayudas en lo peor de la pandemia a una empresa como esta”. Y pidió a la compañía que devuelva «hasta el último euro» de las subvenciones recibidas.
El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, aseguró que Ferrovial va «a contracorriente» en su marcha a Países Bajos dado que: «España es el país de la Unión Europea que presenta mejores perspectivas económicas».
Pr su parte, el presidente del PP y líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, aseguró que: «El hecho de que el gobierno esté señalando con nombres y apellidos a varios empresarios de nuestro país, insultando a los emprendedores, legislando en contra de la captación y el mantenimiento de las inversiones produce efectos lamentables» como la salida de inversores y empresas de nuestro país.
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