Economía
BANCA

Orange finaliza su actividad bancaria con un agujero de 700 millones de euros desde 2017

Orange pone punto final a su aventura bancaria en Francia. La compañía de telecomunicaciones se encuentra en una «negociación exclusiva» con BNP Paribas para acabar con su negocio bancario, que comenzó a finales de 2017. Esta actividad le ha costado unos 700 millones de euros y no cuenta con un horizonte razonable para salir de los números rojos, según publica EFE.

El grupo francés de telecomunicaciones y el primer banco francés anunciaron que el objetivo de esta negociación es definir propuestas para que los clientes de Orange Bank en Francia tengan interés por BNP Paribas. Estas negociaciones pueden extenderse hasta 2024. También se contempla la cesión diferenciada del negocio de Orange Bank en España.

En un comunicado, Orange puso el acento en que la operación se llevará a cabo «con total transparencia», informando sobre los pasos dados y con un acompañamiento para los asalariados. Sobre todo, afirmó que no habrá «ningún cambio» en los servicios a los clientes, en lo que se refiere a créditos en vigor, depósitos o concesión de préstamos. A ese respecto, señaló que «Orange Bank dispone ahora de un balance sólido y seguirá respondiendo a sus obligaciones reglamentarias de aquí a su futura salida del mercado».

Las negociaciones con BNP Paribas no pretenden ceder el negocio de Orange Bank Francia (unos 700 empleados), que simplemente cerrará, sino buscar fórmulas para que el primero consiga atraer a los cerca de 2 millones de clientes de banca del operador de telecomunicaciones.

204.000 clientes en España

La situación es distinta para el negocio de Orange Bank España, que se puso en marcha más tarde (en 2019), que contaba en marzo de 2023 con 204.000 clientes, y que dispone de una arquitectura técnica y administrativa propia y creada desde cero. En este caso, la intención es que BNP Paribas absorba esa actividad en España, una cesión en condiciones que están todavía por definir.

Orange se había embarcado en la banca en noviembre de 2017 de la mano de la aseguradora Groupama en Francia, a la que compró esos activos. Desde entonces y hasta finales de 2022, esa aventura le ha provocado un agujero de 700 millones de euros en el resultado bruto operativo (ebitda). Para BNP Paribas, estas negociaciones exclusivas son en primer lugar una oportunidad para acelerar el crecimiento de su filial de banca digital Hello Bank, que tiene algo más de 800.000 clientes en Francia.

Pero además es una oportunidad para ampliar con España su huella en el resto de Europa (en Bélgica y sobre todo en Alemania, con la marca Consorsbank), donde en conjunto ya tiene 3,3 millones de clientes y ya es rentable.