De Murcia a Estados Unidos: el yogurt helado de Llaollao aterrizan en Texas

Nació en 2009 y ocho años después, va a desembarcar en Estados Unidos. El yogurt helado de Llaollao va a cruzar el charco: la empresa murciana abrirá nueve tiendas en Texas, el primer estado en el que comenzará la expansión norteamericana. Desde allí, seguirán creciendo y llevando su marca a otros destinos.

La compañía española, que es líder del sector del yogurt helado a nivel mundial, cuenta con el 55% de sus establecimientos fuera de España: tiene 227 puntos de venta repartidos por 23 países de América, África, Europa y Asia. Solo en lo que va de año, ha aterrizado en Vietnam, México, Ecuador y ahora, es el turno de Estados Unidos.

«Ha sido un gran éxito cerrar el acuerdo con EE.UU., ya que es uno de los mercados claves a nivel mundial», afirma Pedro Espinosa, fundador de la compañía. De hecho, Estados Unidos va a ser uno de los mercados en los que Llaollao se va a encontrar más competencia: «es el mercado en el que más arraigado está el producto», ya que el mercado estadounidense fue pionero en el lanzamiento del yogurt helado.

La fuerte competencia no ha sido un obstáculo para ellos: «no nos preocupa esa fuerte competencia, ya que nuestro producto tiene una calidad muy por encima de la media que se encuentra en EE.UU.», comenta Espinosa. Además, «el hecho de que sea un producto marca España genera mucha confianza en el público norteamericano», subraya.

El primer estado: Texas

La llegada de los helados de Llaollao «comenzará en el estado de Texas con la apertura de nueve tiendas» añade; “de ahí, nuestro objetivo es continuar la expansión por otros estados”, indica Espinosa.

Y es que, el plan de expansión de Llaollao «se centra muy especialmente en destinos internacionales. Centroamérica, Norteamérica y parte de Sudamérica son algunos de los mercados más atractivos para la compañía» apunta el fundador de la compañía. Su objetivo fundamental, sin perder la pista a los puntos de venta con los que cuentan, es abrir nuevos establecimientos. Y de momento, no van por mal camino.