Economía
SALARIOS

La mitad de las pymes y los autónomos denuncian que la subida del SMI afecta a su competitividad

  • Benjamín Santamaría
  • Economista, analista, conferenciante y máster de educación. Redactor de economía en OKDIARIO y autor de "La economía a través del tiempo" en el Instituto Juan de Mariana

El 49% de las pymes y autónomos españoles afirma que la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) afecta su competitividad, según desvela el II Informe de Pymes y Autónomos de España realizado por la aseguradora Hiscox, el cual pone de manifiesto estos datos coincidiendo con el Día de las Microempresas y Pequeñas y Medianas Empresas del próximo 27 de junio.

Sin embargo, el 74,6% de las pymes y autónomos del sector del comercio están a favor de las subidas salariales como la del SMI, seguido de otros servicios (73,7%) e Industria (60,5%).

Por tanto, el sector considera que aumentar las retribuciones es algo positivo, pero temen sufrir las consecuencias en sus cuentas y en la prestación de servicios.

Si se presta atención al factor de la antigüedad, están a favor de la subida un 78,8% de las empresas con menos de cinco años de vida, y un 70% de las que tienen más de cinco años, mientras que por número de empleados no existen prácticamente diferencias, y es que un 72% de las micropymes (de uno a diez empleados) está de acuerdo, así como un 69,5% de las pymes de diez a 250 empleados.

Según el análisis, donde más disparidad se encuentra es por nivel de facturación, ya que en el caso de las empresas que facturan menos de cinco millones de euros al año un 72% está de acuerdo, sin embargo, el porcentaje de aquellas que ingresan más de cinco millones es del 57,4%.

El presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva.

En cuanto a los efectos que ejerce esta medida en las pymes, las cuales conforman casi la totalidad del tejido productivo de España, un 49,3% declara que las subidas del SMI han afectado a su competitividad.

Las pymes y el SMI

Dentro de estas empresas y profesionales, las más afectadas, según el informe, son las micropymes, con un 71,1% que así lo afirman, mientras que por detrás les siguen las pymes de diez a 250 empleados, ascendiendo este porcentaje al 64,4%.

En cuanto al nivel de facturación, aquellas que facturan más de cinco millones de euros son las que más afirman verse afectadas, ya que así lo indican un 62% de estas empresas, frente al 49,1% de las que ingresan menos de esta cantidad.

Por otro lado, el informe documenta que también existe una desemejanza entre las empresas con más y menos de cinco años de antigüedad, ya que un 55,3% afirma haber visto afectada su competitividad, mientras que este porcentaje es del 49,1% para las empresas más jóvenes con menos de cinco años de vida.

Si se distingue por sectores, tampoco se dan grandes diferencias en impacto en la competitividad del negocio, y es que un 55,3% de las pymes del sector comercio afirman que sí les ha afectado, así como un 55,1% de las de industria.

Frente a estas consecuencias negativas para la competencia de las pymes, el informe resalta que la medida que más ha aplicado este tipo de empresas para intentar compensar la balanza ha sido la de reducción de márgenes, la cual arguyen un 33,1%.

Por su parte, un 23,2% ha subido los precios a los clientes, mientras que un 12,1% afirma ser más estricto a la hora de contratar personal. A estas medidas le siguen, por orden de popularidad decreciente, poner el foco en la mejora de la productividad, despedir trabajadores, incrementar los costes por personal y reducir los sueldos más elevados de la empresa, algo que han llevado a cabo un 3,2% de las compañías.