Economía
OPA BBVA-Sabadell

La hostelería se opone a la OPA BBVA-Sabadell: «Perdemos un banco fundamental para el turismo»

La patronal de la hostelería destaca el servicio que presta ahora Banco Sabadell a las pymes y autónomos del sector

La posibilidad de que prospere la OPA de BBVA sobre Banco Sabadell ha originado críticas por el impacto que tendría en el tejido empresarial. Uno de los sectores más afectados sería la hostelería, que ha mostrado su clara oposición a que BBVA acabe integrando al Sabadell.

Hostelería de España, patronal del sector, asegura que esta unión supone «un posible perjuicio por la reducción de la competencia y por la alta especialización que el Banco Sabadell ha desarrollado en hostelería y turismo, y en la tipología de la pyme y autónomos tan predominante en este sector», señala a este diario Emilio Gallego, secretario general de Hostelería de España.

Como informó OKDIARIO, hay alrededor de 200.000 pymes y autónomos que actualmente son clientes simultáneamente del BBVA y del Sabadell. Y temen que, si sale adelante la OPA, al ser clientes de un único banco éste les recorte el crédito o les endurezca las condiciones. Carlos Torres, presidente del BBVA, se ha comprometido a mantenerlo, pero sólo durante un año.

Banco Sabadell es una entidad clave para el sector de la hostelería y el turismo: «Con ellos tenemos una larga trayectoria de colaboración y una relación estrecha y dilatada en el tiempo. En el caso de Sabadell, valoramos que tiene unas divisiones dedicadas a hostelería y turismo, por lo que lo calificamos como una alta especialización. Siempre que hay un proceso de estas características, lo mínimo que puede surgir es incertidumbre y pensar qué vamos a perder si se produce esta situación», explica.

La importancia del Banco Sabadell para la hostelería también tiene que ver «con la capilaridad y con la segmentación que tiene el Sabadell sobre la pyme y los autónomos del sector». Se trata de un banco que tiene mucho peso en la hostelería en algunas regiones de España. «Por ejemplo, en Asturias, Sabadell Herrero es un banco regional de toda la vida, con una capilaridad impresionante. En esa zona se plantean que, si pierden este banco, puede que los nuevos tiempos sean peores», aclara Gallego.

Una de las principales consecuencias de un posible triunfo de la OPA de BBVA es la pérdida de competencia en la banca. «Nos hace plantearnos qué pasará en el futuro. Por ejemplo, en Murcia, el Sabadell ha incorporado cajas de ahorros y en la Comunidad Valenciana tiene incluso su sede en Alicante. Tenemos una gran incertidumbre sobre la reducción de la especialización y la competencia», explica.

Sabadell, clave

Los ejemplos de los servicios de Sabadell al sector se acumulan. «Sabadell fue muy activo con los temas de tarjetas para el sector. Ahora, estamos con una cuestión de análisis de los dígitos que identifican a las tarjetas de uso de empresa y de las tarjetas de vales de comida. Estamos trabajando mucho con Sabadell y con CaixaBank, es decir, esto que decimos de su altísima especialidad es muy verdadero y estamos trabajando muy a gusto con ellos en distintos ámbitos», asegura Gallego.

Fachada del edificio BBVA, en Madrid. (Foto: EP)

Gallego insiste en que se trata de un sector que tiene unas características únicas y que Banco Sabadell responde a esas especialidades. «Las pymes, los autónomos y, en general, la empresa familiar es un modelo muy típico en nuestro sector. La empresa familiar tiene unas características muy específicas, y este tipo de bancos como el Sabadell lo tienen muy bien trabajado», expone. 

«En resumen, valoramos ese punto de incertidumbre ante la posible pérdida de una entidad financiera que tiene una alta especialización en la hostelería y que trabaja muy bien los autónomos y las pymes. Además, el sector financiero de nuestro país está ya en unos niveles de concentración muy altos», aclara Gallego.  

Como también adelantó OKDIARIO, existen indicadores técnicos que muestran que, con la fusión BBVA-Sabadell, «el índice de concentración bancaria podría alcanzar niveles preocupantes para las autoridades, que podrían verse obligadas a reaccionar». Una falta de competencia que sería especialmente grave en dos regiones eminentemente turísticas como Cataluña y la Comunidad Valenciana.