Economía
SECTOR ENERGÉTICO

Holaluz llama a Greening y otras dos energéticas para una fusión por canje pero no despierta su «interés»

  • Jose de la Morena
  • Jose de la Morena, periodista especializado en economía desde hace más de 15 años, desarrolla su labor en el campo de la comunicación desde el prisma de las tendencias, los números y resultados de las distintas compañías. Una tarea que le ha llevado a conocer a fondo el mundo empresarial. Ha trabajado también en comunicación corporativa y como asesor para distintas marcas internacionales e institucionales.

Holaluz trata de aprovechar el impulso logrado con su reducción de costes para proponer un canje de acciones con Greening, igual que con otras dos compañías, pero la guerra interna contada en OKDIARIO está complicando cualquier tipo de operación.

La idea que tiene en mente la fundadora de la compañía. Carlota Pi, es que, aunque se valore a la baja la acción de Holaluz, el canje le permita aunar esfuerzos con los nuevos socios. Es una forma de conseguir capital, aunque sea con crédito vinculado a las acciones de otra compañía con posterioridad, y de hacer sinergias. Unas sinergias importantes, según las fuentes financieras consultadas por este diario, para las que «los costes son todavía importantes, e incluso la plantilla es excesiva y podría externalizarse».

Aunque tanto Axon Capital e Inversiones como Geroa Pentsioak, dos de los grandes accionistas de Holaluz, coinciden en que la llegada de gestores desde Greening o Grenergy -entre otras compañías con las que se habla de compras y fusiones- sería buena para la empresa, la disputa con Carlota Pi impide que se aplique esta solución.

El problema reside en la gestión final de la compañía, que algunos consideran agotada en manos de su fundadora. Tanto la propia Pi como los dos socios que fundaron la compañía junto a ella siguen confiando en su gestión a pesar del mal 2023, especialmente tras reformular prácticamente todos los niveles de la compañía. Dentro de eso, desde Holaluz insisten en que «la prioridad cuando se realizan este tipo de ajustes es el mantenimiento de los puestos de trabajo».

Greening y Grenergy

Holaluz, que cotiza en el BME Growth, ha tanteado varias opciones, como decimos. Grenergy está en otra dimensión, y las fuentes financieras consultadas aseguran que «es una operación que no tiene sentido salvo que sea a precio de saldo». Desde la propia compañía han preferido mantenerse al margen de este tipo de especulaciones, ya que Grenergy no comenta operaciones que no se producen o que no se están estudiando.

El caso de Greening es diferente. Esta compañía, en términos económicos, «sí lograría unas sinergias fuertes», aunque tienen claro que reducirían costes. De hecho, desde la propia empresa contestaron de esa manera a Holaluz.

Para Greening, cuyo negocio en el apartado de energías renovables es muy similar al que realiza Holaluz, es necesaria «una reducción de costes», incluyendo despidos, puesto que consideran que su forma de trabajar es «más eficiente, con los gastos mucho más acotados».