Errores más comunes al buscar financiación
Muchas veces, para realizar una determinada inversión, las empresas precisan de financiación. Lo más habitual es que, en un primer momento, la compañía se dirija a aquella entidad financiera con la cual opera o con la que está más vinculada. En caso que se deniegue la financiación allí, se opta por buscar otras. Ahora bien, ¿qué hay que tener en cuenta al elegir esta entidad? ¿Con qué aspectos hay que ir con cuidado? A continuación lo explicamos.
¿Qué errores se suelen cometer?
Cuando se busca entidad para encontrar financiación, los errores más comunes en los que se cae son los siguientes:
- Fijarse solamente en el tipo de interés: hay otros aspectos adicionales que determinan la cuantía final a pagar para la financiación, especialmente aquellos referentes a la exigencia de vinculación que la entidad financiera exige. Para la mayoría de préstamos, la entidad pide a la vez que se contraten determinados seguros. Aunque la financiación del préstamo pueda ser a un tipo menor a otras entidades, puede que eso se compense con tener que pagar unos seguros a una prima por encima a la media del sector. Por lo tanto, hay que calcular el global de la operación para determinar la conveniencia de una u otra entidad.
- No tener en cuenta comisiones: hay distintas comisiones asociadas a la apertura y estudio de un crédito o préstamo que suponen, evidentemente, un sobrecoste a afrontar. Del mismo modo, hay que estar muy atentos a las comisiones e intereses por impagos estipulados en el contrato.
- Facilidad para comunicarse con la entidad: hay un componente de servicio que tampoco hay que desmerecer. La comunicación con la entidad debe ser fluida, porque en cualquier momento puede surgir cualquier contingencia o problema que precise de alguna corrección. Por lo tanto, los profesionales con los que tratar deben mostrar solvencia, profesionalidad y un marcado carácter de atención al cliente.
- No presentar un plan de empresa completo: uno de los documentos a presentar ante las entidades cuando se va a pedir la financiación es el plan de empresa. No se trata de un simple trámite, sino que las entidades se fijan con mucha atención en cada uno de los detalles expuestos para estimar la viabilidad de la propuesta. Por lo tanto, hay que incorporar todos los puntos referentes al negocio.
- Presentar unas estimaciones de beneficios o ingresos exageradas: a partir del plan de empresa y del conocimiento de la situación en el mercado, las entidades pueden saber si aquellas cifras que se han presentado corresponden o no con la realidad. En caso de estar sobrerrepresentadas, el hecho de haber intentado un engaño en un procedimiento tan importante como éste trae como consecuencia una falta de confianza que acabará con la denegación del préstamo.
- Menospreciar alternativas no tradicionales: como se ha tratado aquí en otros artículos, existen fuentes de financiación alternativas como los business angel o el crowfunding, que pueden permitir a la empresa abordar un proyecto después de la negativa de las entidades financieras.
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